Florentino Pérez pone 300 millones: la bomba del verano estalla en el Real Madrid (y en el Barça)

En el vestuario blanco se temen lo peor sobre el presidente

Todavía no está todo dicho. Quedan 20 días del mercado de fichajes hasta que eche el cierre el próximo 31 de agosto. En este tiempo puede pasar de todo.

Florentino Pérez no descarta soltar la última bomba del verano para entonces. Pero antes, quiere calibrar el potencial real de la actual plantilla. Las variantes que tiene son más que interesantes.

En el Real Madrid nadie ha hecho un drama con la pérdida de Cristiano Ronaldo. Hay muchos motivos para seguir siendo optimistas.

En especial, uno: Marco Asensio. El crack balear es la gran esperanza de la escuadra blanca. Obviamente será casi imposible compensar los más de 40 goles que CR7 metía por temporada.

Sin embargo, la idea sobre la que trabaja Julen Lopetegui es construir un equipo más solidario en el esfuerzo y compensado. Donde no haya una dependencia tan clara de un solo jugador.

En ese sentido, desde el club piensan que si Asensio da un paso al frente y también asumen galones los hasta ahora escuderos del luso, Gareth Bale y Karim Benzema, habrá equipo de sobras.

No hay que olvidar la presencia de Isco Alarcón, llamado a ser un imprescindible de Lopetegui en sus esquemas. Ya sea jugando como falso extremo, interior o mediapunta.

A ellos se suma el recién llegado Vinicius, que apunta muy buenas maneras, y la inestimable presencia del siempre trabajador Lucas Vázquez.

Da la sensación de que falta gol, pero en realidad todos los jugadores citados son efectivos de cara a portería. Además, en la reserva esperan ansiosos los jóvenes de la casa: Mayoral y Raúl de Tomás.

Sin embargo, el a priori plan de Lopetegui para salvar la temporada del cambio de ciclo –donde es imprescindible sellar la continuidad de Luka Modric– podría no salir bien.

La Supercopa de Europa, prueba de fuego

Por este motivo es importante calibrar antes del 31 de agosto. Por si pudiesen destaparse nuevas carencias en el Real Madrid.

La prueba de fuego está prevista para el próximo 15 de agosto: la final de la Supercopa de Europa que se disputará en Estonia (21:00 horas).

El rival, de calado, no es otro que el Atlético de Madrid. Derbi madrileño para el primer título en juego del curso. Una prueba de fuego de mucho nivel para Lopetegui.

Teniendo en cuenta los refuerzos que ha llevado a cabo el Atlético del Cholo Simeone, será muy soberbio pensar que el Madrid es favorito. Más bien, parece todo lo contrario.

Los rojiblancos estarán casi al completo, ya que tan solo Griezmann y Lucas Hernández se han incorporado tarde. Pero se comenta en Madrid que han regresado pletóricos y en forma.

La presencia de cracks consagrados como Oblak, Godín, Koke y Saúl sumada a la llegada de nuevos y prometedores fichajes como Rodri, Lemar, Gelson y Kalinic hace pensar en un duelo trepidante donde no seria de extrañar que los colchoneros se lleven el gato al agua.

Miedo al Atlético del ‘Cholo’

En el entorno del Atlético reina la euforia y hay quién dice que le podría caer un buen saco de goles al Real Madrid. Una humillación nada más empezar el curso no sería empezar con buen pie.

Lopetegui tendrá un duro examen no solo por estar frente a uno de los mejores entrenadores del mundo, sino por la plantilla alucinante que ha confeccionado el Atleti.

Por primera vez después de mucho tiempo, podría decirse que los de Simeone tienen un equipo al nivel del Barça y el Madrid. Este puede ser su año.

Y en el caso de que se perpetre el crimen, salte la sorpresa en Estonia y se confirme el cataclismo, Florentino Pérez tendrá que volver a sus orígenes: la chequera para apagar el fuego.

El presidente lleva mucho tiempo ahorrando para poder abordar una operación estelar. Y no se descarta que llegue antes del 31 de agosto.

Si la caída del Madrid frente al Atlético es gorda, Florentino tirará de cartera para fichar a un crack mundial. Y la lista de nombres es la de siempre.

Y, de rebote, palo al Barça con Dembelé (o favor)

Los preferidos siguen siendo Neymar, Mbappé o Harry Kane. Y la capacidad de endeudamiento del Madrid permitiría invertir hasta 300 millones de euros.

Una operación de locura que serviría para curar con ilusión una herida muy sangrante. En el caso de ir a por un crack del PSG, el Barça podría ser el gran perjudicado.

Thomas Tuchel, entrenador del club parisino, es un enamorado de Ousmane Dembelé. La jugada podría consistir en que el PSG se lleva al extremo del Barça y Florentino a una de las dos grandes estrellas de Nasser al Khelaifi.

Florentino Pérez no se olvida de Mbappé (y Dembelé puede entrar en la operación a tres bandas) | EFE