La conspiración de Griezmann contra Messi con ayuda de Koeman

El delantero argentino del Barça Leo Messi se queda solo ante el peligro en un vestuario que estará dominado por Griezman y compañía con el apoyo de Koeman

Leo Messi y Antoine Griezmann
Leo Messi y Antoine Griezmann

No le espera un año fácil a Leo Messi en el FC Barcelona. La salida de Luis Suárez rumbo al Atlético de Madrid lo deja solo y desamparado en un vestuario en el que acumula más enemigos que aliados. Y sin el apoyo de los mandatarios, los que nunca fueron buen vistos por Leo tienen ahora la oportunidad de dar un golpe en la mesa.

La opinión pública de los aficionados del FC Barcelona considera a Messi como un Dios. Pero de puertas para dentro del vestuario, el escenario es otro bien distinto. Con el paso de los años, Messi ha ido perdiendo adeptos dentro del club.

Bartomeu responde a la afrenta de Messi

Empezando por la directiva de Josep Maria Bartomeu y compañía. Estos siempre han estado a los pies del crack. Pero el pulso vivido este verano entre el capitán y los responsables lo ha cambiado todo. Teniendo los días contados como dirigente del club, a Bartomeu no se le cayeron los anillos a la hora de poner a Messi contra las cuerdas y evitar su salida.

Un episodio que, a ojos de la parroquia culé, no dejó nada bien a Bartomeu, que no ha dudado en llevar a cabo su venganza. Bartomeu quiere acabar con su supremacía en el equipo. Y ya ha movido hilos para que así sea.

Messi se queda solo

En primer lugar, el mandatario ha dado órdenes a Ronald Koeman de hacer limpieza del vestuario y eliminar a los mayores aliados del de Rosario en el equipo: Arturo Vidal y Luis Suárez.  El primero ya está en el Inter de Milán, mientras que el segundo no tardará en ser presentado en el Wanda Metropilitano, después de haberse despedido de sus compañeros y de la Ciutat Esportiva Joan Gamper llorando a lágrima viva.

Leo Messi y Luis Suárez
Leo Messi y Luis Suárez

Una situación que deja a Messi solo ante el peligro y lo deja en manos de los jugadores con los que nunca mantuvo una buena relación. Por ejemplo, con el clan de los franceses formado por Antoine Giezmann, Ousmane Dembélé, Clement Lenglet o Samuel Umiti. Sobre todo con el primero, con el que nunca ha llegado a entenderse dentro y fuera del campo.

Antoine Griezmann
Antoine Griezmann

Los franceses toman el control

Además, el dominio de los galos en el seno del grupo no será frenado por un Koeman que también tiene órdenes de no hacer ni una sola concesión con el argentino, y de que no permita que le trate como trató al Tata Martino, que llegó a decirle aquello de que “yo sé que si usted llama al presidente mañana me echa, pero no me lo haga saber a cada momento”.

Y ojo, porque Leo tampoco contará con el apoyo de sus cercanos de toda la vida. De jugadores como Gerard Piqué y Sergio Busquets, que ya no ríen las gracias al crack y con los que la relación se ha enfriado mucho en las últimas temporadas.

Leo Messi y Gerard Piqué
Leo Messi y Gerard Piqué

El único aliado de Messi

Así las cosas, Jordi Alba sería el único fiel incondicional que le queda a Leo en el vestuario. Un Alba que también está en el punto de mira y que si cuenta para Koeman no es por otra cosa que por la desconfianza que tiene en Junior Firpo y por las dificultades económicas que supondría para el club realizar el fichaje de un lateral izquierdo.

Parece que la intentona de Messi de señalar a Bartomeu por su mala gestión no le ha salido demasiado bien al delantero. Ha conseguido que la moción de censura tire adelante y retratarlo de cara a la parroquia culé. Pero a cambio se ha quedado solo en el vestuario. Y pagará su pulso a Bartomeu pasando el que será uno de los años más complicados en el club.