“Cerrado”. Florentino Pérez coge un avión: el tapado (y la bomba) en el Real Madrid

​Florentino Pérez tiene dos cosas muy claras en estos momentos: la primera de ellas es que quiere contentar a Zidane dándole al técnico francés todos los jugadores que está pidiendo. De momento ya son cinco. Y llegarán más.

La segunda es que, también a petición de Zizou, el presidente blanco quiere evitar a toda costa llegara  los días finales del mercado con los deberes por hacer. No debe ser este un verano de culebrones en el Real. De momento se han aplicado el cuento y ya han cerrado varios nombres.

Es por eso que, a diferencia de otros veranos en los que Florentino apretaba sin cesar para acabar haciéndose con lo que querían sin contemplar otra opción que el triunfo, en este verano el presidente y la secretaría técnica están trabajando en varios frentes por si fallan los gran deseados.

Florentino Pérez mueve ficha

Y un ejemplo perfecto de ello es el caso de Paul Pogba. No es ningún secreto que el centrocampista francés es el gran deseado de Zidane. El técnico no se esconde al asegurar que busca una plantilla en el que la potencia y el físico sean dos cualidades esenciales.

Y ahí Pogba, un  jugador de recorrido, de campo abierto y que necesita metros para desplegar su mejor juego, encaja a la perfección. El problema es que el Manchester United no tiene intención alguna de negociar con el Madrid. Los ingleses se han cerrado en banda y quiere forzar al jugador (que ya ha dicho que quiere irse) a empezar la pretemporada con ellos.

Además, otro inconveniente para el Madrid es que Paul está también coqueteando con la Juventus de Turín. Parece ser que la idea de regresar al club en el que se convirtió en uno de los mejores del mundo y jugar junto a Cristiano Ronaldo le atrae tanto o más que aterrizar en el Bernabéu.

De ahí que, por mucho que Zidane esté apretando para que Florentino fuerce al United a sentarse a negociar, el presidente está también abriendo otras vías. De hecho, cuentan que en las últimas horas el presidente ha viajado a Ámsterdam para negociar el fichaje de un tapado que se ha convertido en el primer ‘plan b’ de Pogba.

El tapado de Florentino Pérez

Y ese no es otro que Donny van de Beek. El centrocampista del Ajax ha ganado mucha fuerza en las últimas horas. Y por un motivo muy simple: la operación es mucho más sencilla que la de Pogba.

Cuentan desde dentro que, tras sondear al centrocampista, el holandés se ha mostrado encantado ante un posible traspaso. Además, la oferta del Madrid rondaría los 70 millones de euros, una cantidad que en Ámsterdam dan más que por buena.

Es por eso que muchos consideran que el fichaje está “cerrado”. No porque sea oficial, sino porque Florentino sabe que con una llamada o con un último movimiento de confirmación Van de Beek sería blanco a los pocos minutos.

Un jugador que tiene muchos seguidores dentro de la secretaría técnica blanca. Ha sido, de hecho, uno de los artífices del buen hacer del Ajax este año en la Champions y, a diferencia de Frenkie de Jong, Donny es un jugador más vertical, de recorrido, justo lo que busca Zizou.

No es la única alternativa

Eso sí, en el Madrid sabe que el holandés no es la única alternativa. Sí que es la más factible, la más fácil y la más barata. Y es que parece ser que el nombre de Eriksen está empezando a dejar de sonar por los pasillos del Bernabéu.

Entre otras cosas porque hay quien apunta que Zidane no está convencido del todo del fichaje del danés. Además, cuentan desde Londres que el propietario del Tottenham, Daniel Levy, está incluso dispuesto a no venderlo ahora pese a saber que el próximo año se iría gratis si no acaba renovando.

Eso sí, el danés no está descartado del todo. Como tampoco lo está otro de los nombres que está ganando protagonismo en los últimos días: Fabián Ruiz. El buen hacer del español en la Eurocopa Sub-21 está provocando que muchos en el Madrid lo vean también como una buena opción.

El problema es que el Nápoles, consciente del interés de los blancos, lo ha declarado intransferible. Una postura que seguro que cambiaría si Florentino se plantara en San Paolo con una cantidad cercana a los 70 u 80 millones.

Cifras que se asemejan a las de Van de Beek y que se alejan de los, como mínimo, 160 millones que costaría un Pogba que, además, no cuenta con la bendición de buena parte de las vacas sagradas del vestuario.