Ni Mbappé, ni Neymar, ni Hazard: el tapado que Zidane pide a Florentino Pérez para el tridente (y el medio campo) del Real Madrid 2019-20

El técnico galo pasa dos nombres al presidente del equipo blanco

El fichaje de Eder Militao por el Real Madrid es buena señal de que, este verano sí, Florentino Pérez piensa meter toda la carne en el asador. La contratación del central es solo el principio. Zinedine Zidane no ha regresado a Chamartín si no es bajo la garantía de que este curso si se producirá una inversión importante en el equipo.

El técnico galo tiene claro que para volver a ganar hace falta una renovación profunda y son varios los nombres que le ha puesto el míster al presidente sobre la mesa.

Una de las zonas a reforzar de forma innegociable es el ataque. Por un lado, el entrenador quiere un galáctico que cubra el hueco que dejó Cristiano Ronaldo y que nadie ha sido capaz de ocupar. El crack que propone ZZ para esa posición es Eden Hazard.

Harry Kane y Eden Hazard | EFE

Zidane quiere a Hazard sí o sí

El crack del Chelsea es una de las debilidades del técnico. Lo es desde su primera etapa en Concha Espina. Y hoy por hoy es la prioridad de Zizou para el ataque.

En cuanto al centro, Zidane pretende recuperar a Karim Benzema y meter en la plantilla a un ariete como relevo generacional. Luka Jović, del Eintracht de Frankfurt, es uno de los favoritos.

Pero Zidane tiene más prioridades. El francés quiere más opciones para el ataque. Y es el míster no quiere ver a Gareth Bale. El de Cadiff no es del agrado de Zinedine.

Bale está fuera

Ya durante los últimos meses de su primera etapa, Bale pasó a un segundo plano. El galés perdió la titularidad. Y Zizou no olvida algunos episodios de desidia del jugador.

Por ejemplo, cuando en un partido contra el Leganés, donde también fue suplente, se dejó las botas de fútbol dentro del vestuario, teniendo que salir corriendo a por ellas a medio partido. Una muestra de que la reacción de Bale ante la suplencia no fue otra que el pasotismo. Y Zidane no quiere jugadores con actitudes reprobables.

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El tapado de Zidane para el tridente

Así, tal y como anunció Diario Gol hace unos días, Sadio Mané, del Liverpool, es otra de las propuestas de Zidane. El senegalés puede jugar tanto por la izquierda como por la derecha. Es decir, podría ser el relevo de Bale, o por la izquierda si finalmente Hazard no saliera del Chelsea.

Una información de la que se ha hecho eco France Football, que confirma la primicia ofrecida por este medio.

Sedio Mané gana enteros

Se trata de un delantero que suma ya esta temporada 17 goles y dos asistencias en 29 partidos disputados en la Premier League y otros 3 tantos y dos asistencias en 8 partidos de Champions League. Además, a sus 26 años asegura una gran proyección por delante.

Cabe decir que si fichaje no será fácil. El jugador renovó el pasado noviembre hasta 2023, con lo que su precio no estará por debajo de los 100 millones de euros. Y no solo eso: es una de las piezas clave del equipo de Jürgen Klopp.

Dudas con Modric y Kroos

Pero hay más. Zidane también quiere renovar la medular. El futuro de Luka Modric está en el aire. El croata está esperando una mejora de contrato que no llega. Una ficha superior a la que tiene ahora y que sí le ofrece el Inter de Milán. Y el de Zadar sabe que si quiere firmar un último gran contrato es ahora o nunca.

Asimismo, la continuidad de Toni Kroos es otra de las incógnitas para la próxima temporada. El alemán considera que ha tocado techo en el Madrid y tiene ganas de iniciar una nueva aventura. Y el Manchester City ya le ha abierto las puertas.

Fichaje inminente para el centro del campo

Así las cosas, Zidane también ha puesto hilo en la aguja en cuanto al centro del campo. Y también tiene algunas prioridades.

Como adelantó Diario Gol este lunes y también han corroborado varios medios este martes, en los despachos blancos han puesto ya en marcha de la maquinaria para hacerse con los servicios de Adrien Rabiot.

Adrien Rabiot, a tiro

El jugador termina contrato en junio y Florentino no quiere perder ni un minuto en hacerse con un jugador que, vistos los precios del mercado futbolístico, es un auténtico chollo. Está dispuesto a ponerle una ficha de 12 millones de euros y soltar otros 15 ‘kilos’ para que el agente del futbolista y de los intermediarios remen a favor de su fichaje por el Madrid.