Koeman vive una guerra civil en el vestuario del Barça

La guerra civil en el FC Barcelona está servida. Cuando parecía que el 5-1 cosechado por los hombres de Ronald Koeman en el estreno de los blaugrana en la Champions League contra el Ferencváros iba a calmar las aguas, saltó una noticia que puso más patas arriba el club catalán. Las renovaciones de Gerard Piqué, Marc-André ter Stegen Clement Lenglet y Frenkie de Jong ha generado una división sin precedentes den el vestuario culé.

Josep Maria Bartomeu quería cuadrar las cuentas de la temporada como fuera para contrarrestar la reducción del presupuesto causada por la crisis sanitaria del coronavirus. Sus intenciones pasaban por reducir el sueldo en un 30% a los jugadores y que lo restado se les abonara en sus últimos años de contrato. Un movimiento que no dejaba de ser una bomba de relojería para el próximo presidente.

Los futbolistas se niegan a rebajarse el sueldo

Sin embargo, el grupo, con los cuatro capitanes metidos en el ajo, redactó una carta en la que se negaban a aceptar la rebaja de sueldo. Un panorama que ponía a Bartomeu contra las cuerdas, enfrentado a un vestuario que lleva tiempo mosqueado con los responsables.

Sin embargo, de repente, se supo que Ter Stegen, De Jong y Lenglet se habían desmarcado del asunto. No estamparon su firma en el burofax que se envió al club.  No solo ellos. Piqué, que ya había firmado negarse a rebajarse el sueldo, también se desdijo de su decisión.

Ter Stegen, De Jong, Lenglet y Piqué se desmarcan

Un paso delante de los cuatro futbolistas que ha sido elogiado desde varios frentes. Sin embargo, tras el partido contra el Ferencváros, se supo toda la verdad. Que los cuatro futbolistas estaban negociando sus renovaciones por su lado, traicionando la confianza y el sentir del resto del equipo, y sobre todo el liderazgo de Leo Messi.

Se conoce que Ter Stegen llevaba ya meses negociando su ampliación de contrato. Pero sorprende que se renueve a De Jong, cuando hace solo un año que llegó y mientras está firmando una temporada para olvidar. Y más todavía el caso de Piqué, que había firmado la carta negándose a renunciar a parte de su sueldo.

Bartomeu consigue dividir el vestuario

Un panorama que no hace más que revelar la estrategia que ha seguido Bartomeu. El presidente a aplicado aquello de ‘divide y vencerás’. Y lo  ha conseguido.

Porque este miércoles tocaba celebrar una mesa de negociación para llegar a un acuerdo sobre los nuevos sueldos de los jugadores. Una reunión a la que los futbolistas ya han anunciado que no acudirán. Y menos después de la jugada de Bartomeu. Porque ya estaba todo preparado para dar el anuncio de las cuatro renovaciones justo el día antes de la celebración de la mesa de negociación.

Guerra civil en el vestuario de Ronald Koeman

Pero no se equivoquen. Messi, Jordi Alba, Sergio Busquets o Antoine Griezmann no están tan dolidos con el mandatario como si lo están con los cuatro renovados. Porque consideran que han ido a lo suyo, velando solo por sus intereses individuales, y olvidándose del resto del grupo. No han ido todos a una. Y los que se han distanciado lo han hecho en silencio, con nocturnidad y alevosía.

Hace tiempo que en el vestuario culé existen grietas que con el tiempo se han ido haciendo más grandes. Y lo ocurrido en los últimos días no ha hecho más que acabar de romperlo definitivamente.  La guerra civil está servida en el vestuario de Ronald Koeman.