Neymar no ha sido el único con cláusulas extravagantes: los contratos más excéntricos del mundo del fútbol

El fichaje de Neymar por el Al-Hilal ha sorprendido a todo el mundo. Además de un salario millonario contará con grandes beneficios que él mismo ha exigido. Una mansión con 25 habitaciones, ocho autos de lujo, un chófer 24 horas los 365 días del año y un avión privado para su uso y disfrute, además de pagos extras, son algunas de las cláusulas que se han acordado en su nuevo contrato. 

Este acuerdo es solo una muestra de los millones que mueve el mundo del fútbol y en especial la liga árabe, quien en estos momentos también cuenta con Karim Benzema o Cristiano Ronaldo, entre otros, que al igual que Neymar, cuentan con contratos estratosféricos. Sin embargo, el carioca no es el único jugador que ha tenido cláusulas extravagantes de este tipo. 

La Razón ha realizado una recopilación de algunas de las cláusulas más raras que han firmado algunos futbolistas a lo largo de sus carreras profesionales. Una de las más sorprendentes que se conocen a día de hoy es la de Stefan Schwarz a la hora de firmar su fichaje por el Sunderland Association en 1999. Al club llegó el rumor de que uno de sus consejeros tenia un billete para viajar al espacio en 2002 y a la hora de firmar su contrato le prohibieron hacer este tipo de viajes, por miedo a que el jugador pudiese marcharse también. 

Esta historia le llevó a ser conocido en la Premier League como ‘El Astronauta’. A esta historia se suman las excentricidades de Ronaldinho, quien pidió una casa con piscina, una pista de fútbol playa, otra de fútbol siete y hasta cuatro mayordomos a su servicios para firmar su fichaje con el Querétaro en 2014. 

Messi es otro de los jugadores que ha contando con cláusulas extrañas. En su llegada al Barça firmó un acuerdo con el que estaba obligado a integrarse en las sociedad catalana. Aprender el idioma y poder abandonar el club gratis si Cataluña conseguía la independencia eran algunos de los puntos de este contrato.

Ahora, en el Inter de Miami, también cuenta con una cláusula que resulta sorprendente: no jugará en los campos que tengan césped artificial. Esto supone que no estará presente en los partidos ante el New England Revolution, los Timbers, el Seattle Sounders, el Charlotte FC y el Atlanta United. El Barça también firmó una cláusula “antimordiscos” a Luis Suárez, por la que se establecía que tendría que indemnizar al club si agredía a otro jugador. 

Otras de las cláusulas más extravagantes que se conocen son las de Moise Kean, a quien la Juventus de Turin le prometió un tractor y equipación agrícola que nunca llegó, o la de Giuseppe Reina, quien estableció en su contrato con el Arminia Bielefeld que recibiría una casa por cada año de contrato que cumpliese en el club, la sorpresa fue que el conjunto alemán le dio estas casas, pero de Lego. 

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Las cláusulas más sorprendentes más allá de las de Neymar en Arabia Saudí

Muy sonado fueron los casos de Spencer Prior, a quien el mandatario del Cardiff City FC le obligó a incluir en su dieta testículos de cordero con limón y salsa de perejil, o el de Van der Vaar, a quien el Betis le prohibió utilizar cualquier zapato de deporte de color rojo a cual de la rivalidad del club con el Sevilla. 

También fueron muy tratados los de Mario Balotelli, quien fichó por el AC Milán con una cláusula “antiescándalos” en la que se le obligaba a no realizarse peinados excéntricos al considerar que no eran acordes al club, además de no publicar mensajes polémicos, o el de Romeo Castelen a quien el Volga Nishni acordó pagarle un salario acorde a los minutos que jugase. 

Las cláusulas del contrato de Neymar no llegan a estos niveles, pero supone un acuerdo que ha dejado a muchos con la boca abierta. El carioca gozará de todo tipo de lujos en Arabia Saudí, aunque se espera que no sea por mucho tiempo, ya que sus planes pasan por volver a Europa antes del Mundial de 2026.