“Me voy con Messi al Barça”. Y juega en el Real Madrid. Traición a Florentino Pérez

Florentino no perdona el chantaje de Isco. El malagueño ha vuelto a la titularidad en el partido de Copa del Rey ante el Melilla. Vuelve al once inicial, después de no hacerlo desde la época dónde en el banquillo blanco estaba Julen Lopetegui. Y marca dos goles.

No tiene feeling con Solari

Con Solari ésta ha sido la primera vez que juega desde el inicio y, además, como capitán del equipo. Sus enfrentamientos y rifirrafes con el técnico argentino llegaron a dejarlo fuera de la convocatoria en el partido de Champions en Roma.

Todo esto ocurrió, después de que en Ipurúa el internacional español se negase a saludar al nuevo entrenador. Y delante de toda la plantilla. Fue un gesto que no gustó en el cuerpo técnico y tuvo su castigo.

Además, este no es el único episodio que le envuelve en el centro de la polémica. Su egocentrismo en el vestuario tampoco está bien visto por sus compañeros. Y es que llegó a pronunciar: “Soy Isco y tengo que ser titular”, según ha podido saber este medio.

Su estado de forma, en el punto de mira

Tampoco ayuda su forma física. En medio del debate si debía jugar o no, apareció una imagen captada del partido ante el Valencia, dónde se aprecia que tienen un poco dejado su peso y que utiliza una camiseta compresora de interior para disimularlo, algo que reconocen desde la plantilla. 

Tanto fue así que al día siguiente publicó en su perfil de Instagram una foto sin camiseta, luciendo abdominales y dónde insertó una encuesta pidiendo opinión sobre su estado físico. Aunque no reparó en que no tenía cicatriz alguna de la reciente operación de apendicitis a la que ha tenido que ser sometido. Una clara prueba que evidencia que esa imagen no estaba actualizada y que deja al malagueño retratado. Se apunta que su vida social es más activa de los normal y se cuida poco la dieta desde que tiene una nueva pareja. 

Jugar la Copa es un castigo

Desde el entorno del jugador, se considera que ponerle a jugar en el partido de esta tarde de Copa es un nuevo aviso de que las cosas no están yendo bien entre preparador y futbolista. Rodeado de suplentes y jugadores de la cantera.  

Los ‘pesos pesados’ de la plantilla y titularísimos hoy han disfrutado de un día de fiesta, aprovechando que es el Día de la Constitución y festivo en toda España. Sergio Ramos, Modric, Benzema, Bale y Courtois tienen todo el día para pasarlo con la familia. Sin embargo, el andaluz está en el grupo de los ‘no habituales’ y ha tenido que pasar el trance de jugar contra un equipo de Segunda B.

La traición a Florentino

Eso sí, todo esto tiene un punto inicial. Éste se produjo cuando Isco renovó con el Real Madrid. Las pretensiones del club no eran las que el ex del Málaga quería y llegó a amenazar a Florentino Pérez con una traición: “Me voy con Messi al Barça”, son las palabras que, desde dentro del club, cuentan en una tensa reunión entre presidente y jugador.

 Ambos llegaron a un acuerdo, pero Pérez no olvida esa situación y al último equipo que dejaría que se marchase es al club culé. Su cláusula es de 700 millones de euros, fijada tras firmar su contrato hasta 2022.

Sin embargo, esta cláusula solo se respetaría si su destino fuese la Ciudad Condal y sería un castigo más para el malagueño, esta vez procedente de la parte noble del Santiago Bernabéu.

Su caché ha bajado en Europa

El rendimiento, durante esta temporada, del ‘22’ madridista ha hecho que su caché haya disminuido entre los grandes de Europa. Si la temporada pasada se podía pedir hasta 180 millones de euros por él, ahora en el club comentan que podría aceptarse alguna oferta por 100. E incluso, por menos.

Saben que el precio de un jugador lo ponen las ofertas y en la Premier que es dónde más han preguntado en los últimos tiempos por el mediapunta ya no le ven como esa estrella que la rompía en el Madrid y la Selección.