“Negocia con el Barça”. Y es la mayor puñalada a Florentino Pérez (y no es Neymar y compañía)

Asignatura pendiente. No hay dudas de que el FC Barcelona tiene una grandísima y potentísima plantilla. Son muy pocos los que no pondrían a los culés como candidatos a ganarlo todo esta temporada.

Sin embargo, el club hay asignaturas pendientes. Y desde hace muchos años. Las entradas y salidas de los cracks de club catalán siempre han ido por norma general acompañadas de cierta polémica. Sobre todo desde la entrada de Josep Maria Bartomeu a la presidencia de la entidad. El recientemente no renovado Robert Fernández es buena prueba de ello.

Mal inicio de Robert Fernández

La carta de presentación del valenciano cuando aterrizó en el Barça como secretario técnico fueron los fichajes de Aleix Vidal (17 millones) y Arda Turan (34 millones). El club estaba entonces bajo el castigo de la FIFA, que prohibió que el equipo pudiera inscribir a jugadores durante dos periodos de mercado y cerró las llegadas del lateral y el centrocampista, aunque no pudieran jugar hasta enero.

Ya fuera por haber pasado tres meses sin competir o porque no tenían la calidad suficiente, lo cierto es que ambos han sido dos de los fracasos más grandes de la secretaría técnica en los últimos años. Aleix ha regresado al Sevilla, mientras Arda cumplirá su segunda temporada en el Basaksehir a la espera de una posible venta antes de que cumpla su contrato en el 2020.

El segundo año de Robert en la secretaría técnica fue algo mejor, aunque no estuvo exenta de fracasos.

Más fichajes fallidos de Robert Fernández

Paco Alcácer (30 millones) y André Gomes (37 millones) fueron los fichajes estrella de una lista que completaron Samuel Umtiti (25), Lucas Digne (16,5), Jasper Cillessen (13) y Denis Suárez (3,25). De ellos, solo Umtiti y Cillessen han sido un acierto.

Alcácer fichó por el Borussia Dortmund este verano después de pasar sin pena ni gloria por el Camp Nou. Igual que Gomes, cedido al Everton. Tampoco Digne ha tenido suerte en el club, del que este verano también se fue rumbo al conjunto de Merseyside. Denis sigue en el Barça, pero no se puede decir que repescarlo haya sido un acierto. Y es que si permanece en el club es porque no tiene a donde ir. Así, solo Umtiti y Cillesen fueron un acierto.

Y qué decir del ejercicio 2017-18. Ese verano llegaron Ousmane Dembélé, que sigue buscando su sitio en el club 140 millones después entre fijos y variables; Nelson Semedo (30 millones) con el que Ernesto Valverde cuenta más bien poco, y Paulinho (40), que funcionó muy bien, pero al que el club se ha quitado de encima este verano. Es decir, uno de los pocos fichajes buenos termina saliendo del club en el primer año.

Coutinho, el único que se salva

Ya en el mercado invernal llegaron Yerry Mina, que en verano, seis meses después, también salió, y Phillippe Coutinho (160 millones entre fijos y variables), el único que ha funcionado a la perfección. Más valía que fuera así después de la morterada que soltó el club de la capital catalana.

La destitución de Fernández y la llegada de Eric Abidal parecía que cambiaría la política de fichajes, pero no se puede decir que este verano haya sido mucho mejor.

Eric Abidal no mejora el panorama

Malcom no tiene minutos y tampoco Clement Lenglet, que de momento sigue a la sombra de Piqué y Umtiti, aunque ninguno de ellos haya demostrado un buen nivel en lo que va de temporada.

Asimismo, algunos cracks tampoco ven del todo claro el fichaje de Arturo Vidal, mientras que Arthur todavía es un melón por abrir. Cabe decir que el brasileño es un fichaje fraguado por la anterior secretaría técnica.

Lo único bueno que se le puede apelar a la actual secretaría técnica son las ventas de este verano. Las mejores de la última década.

El Barça mueve ficha en la secretaría técnica

Vistos los resultados logrados en el mercado futbolístico, Josep Maria Bartomeu y compañía ya están trabajando en el primer fichaje del próximo curso. Y no se trata de un jugador. Según apuntan algunos medio, el Barça quiere fichar a Monchi, y alguna voz asegura que ya “negocia con el Barça”. Los primeros tanteos ya se han producido.

El ex secretario técnico del Sevilla ya demostró en el Pizjuán su saber hacer en cuestión de fichajes, y en la Roma tampoco está decepcionando. Todo lo contrario. Y es que pocos como Monchi saben comprar tan barato y vender tan caro.

Además, Abidal tampoco tiene el beneplácito de todos los miembros del club, así como tampoco cuenta con la experiencia necesaria. El francés podría tener los días contados.