Dembélé amenaza con plantarse y hace dudar a Laporta

Pasan los días y el futuro de Ousmane Dembélé sigue siendo toda una incógnita. Y la situación de tensión está empezando a incomodar a un FC Barcelona que comienza a preparar el terreno en caso de que el francés abandone la plantilla.

Con un gran cartel en toda Europa, las negociaciones de renovación con el conjunto culé se encuentran totalmente estancadas debido a las desorbitadas exigencias salariales que el galo propuso al club azulgrana para extender su vínculo con el conjunto catalán.

Las negociaciones continúan rotas

El culebrón sigue sumando capítulos, y conforme avanzan los días, la tensión va en aumento. Las posturas de ambas partes son claras, y no parece que ninguna de las dos partes vaya a ceder. Por motivos evidentes, el Barça ni puede permitirse ni tiene planteado acercarse a las demandas económicas del francés.

Dentro del cuerpo técnico y directiva culés, encabezados por Xavi, en todo momento han apostado por la continuidad del francés. Tal es así, que no hace no un mes el técnico de Terrasa aseguraba que todo estaba encaminado: “Él ha sido claro conmigo, soy positivo para que renueve”.

La infame reunión terminó con las posturas más alejadas que nunca, y con un Barcelona que ya planifica el futuro sin el francés, a pesar de que venga de firmar buenas actuaciones como el encuentro de Supercopa de España frente al Real Madrid, en el que fue la principal amenaza ofensiva.

El francés, dispuesto a tensar la cuerda

La postura del futbolista, por su parte, parece cada vez más clara. Teniendo en cuenta que el Barça no va a ceder ante sus demandas, y sabedor del gran número de pretendientes que tiene a lo largo y ancho de Europa, el francés, libre para negociar con cualquier club, no tiene prisa para que su futuro se resuelva de forma inmediata.

Aquí es donde colisionan ambas posturas. El conjunto catalán, en caso de que las negociaciones por su renovación terminen por fracasar, quiere venderlo este mismo mes, con el objetivo de que no abandone Can Barça a coste cero.

El francés, por su parte, no tiene intención de moverse de Barcelona como mínimo hasta junio. Sus opciones pasan o bien porque el club culé ceda ante sus exigencias salariales, o buscar destino fuera de España sin dejar ni un euro en las arcas culés, llevándose en el camino una jugosa prima de fichaje.

Jugador y agente tienen la sartén por el mango, lo saben, y están dispuestos a utilizar ese factor para forzar la situación hasta donde sea necesario. Incluso si eso conlleva pasarse los primeros seis meses de 2022 en la grada del Camp Nou.

Seis meses en la grada, una opción real

Así lo afirma SER Catalunya, que tilda a la situación de insostenible para la entidad blaugrana. Y es que, vista la postura del futbolista, el conjunto culé tiene todas las de salir perdiendo, ya que ni siquiera un castigo como dejarle el resto de la temporada en la grada sería un factor que le hiciera replantearse su decisión.

Tampoco pueden obligarle a salir este mes contra su voluntad, ni tampoco emprender acciones legales contra su forma de proceder, ya que el hecho de que su contrato finalice en menos de seis meses otorga al futbolista libertad total para negociar con cualquier club.

Ante este panorama, el Barça está contra las cuerdas, y a día de hoy, la única opción viable para el conjunto culé parece estudiar la situación y elegir la vía menos mala, porque en este momento, y si la situación no da un vuelco de 180 grados, no hay un escenario bueno.