Marco Asensio desata un ataque de celos bestial en el Real Madrid

El buen partido del mallorquín escuece dentro del vestuario blanco

La goleada del Real Madrid al Sevilla en el último encuentro de Liga en el Bernabéu no ha sentado bien a todo el mundo. Hay un jugador de la plantilla de Zinedine Zidane que se siente señalado y traicionado.

No es otro que Isco Alarcón. Cuando antes del partido se supo que el andaluz no jugaba, saltaron las alarmas. La afición no entendía como uno de los jugadores con más ritmo y en mejor estado de forma no jugaba.

Al acabar el partido se supo que había sido Cristiano quién le había pedido a Zidane que Isco no jugara y que en su lugar lo hiciera Marco Asensio. Y claro, visto lo bien que fue el partido para los merengues, el ataque de celos que tiene el malagueño es descomunal.

Traicionado

El caso es que Ronaldo y Alarcón no se llevan bien. Su relación es más que fría y apenas se hablan. Por distintos motivos que viene de lejos, cada uno está haciendo la guerra por su lado en un vestuario cada vez más dividido.

El problema para Isco es que, o al menos eso es lo que el creía, contaba con Asensio para hacer presión en contra del crack de Madeira. Pero parece ser que la realidad es otra. Poco a poco el mallorquín se ha ido acercando a ‘Cris’, algo que a su amigo español le ha sentado como una patada.

Este acercamiento se pudo ver en el césped. Tras marcar el portugués gracias a una gran asistencia de Marco, el abrazo entre los dos fue mucho más efusivo que el que nunca se han dado Cristiano e Isco.

Molesto

Una abrazo que molestó, y mucho, al ex del Málaga, que ve como día a día Asensio se va acercando paso a paso a Ronaldo. La tensión entre el andaluz y el portugués es tan evidente que, simplemente viendo como los dos se saludaron en el cambio del delantero por el centrocampista, ya nadie puede negarlo.

Una tensión que, si bien hace poco existía entre el clan de los españoles (con Isco y Marco a la cabeza) y el de el flamante ganador del Balón de Oro, Asensio se está encargando de rebajar con su acercamiento al astro.

Veremos si es flor de un día o realmente es ahora Alarcón el que se está quedando sólo en su cruzada contra Cristiano. Una cosa sí está clara: el cabreo del español con su gran amigo Asensio no se lo quita nadie.