Simeone se fija en el Barça para reforzar el lateral izquierdo: quiere dar un nuevo golpe entre clubes
Tras otras muchas operaciones entre ambos clubes, el Atlético quiere firmar una más aprovechando las dudas
Todo parece indicar que Diego Pablo Simeone va a continuar, al menos, una temporada más en el Atlético de Madrid. Acaba de superar el récord de Luis Aragonés como entrenador con más partidos, y ha dado la vuelta al equipo tras el Mundial de Qatar. Por ello, de momento, es él quien está expresando sus deseos al club, y ha vuelto a poner el ojo en Barcelona.
Entre Atlético y Barça se han firmado multitud de acuerdos, donde el club rojiblanco ha salido más que favorecido. Primero fue con David Villa, quien llegó y fue determinante para que se ganará la Liga. Lo mismo sucedió con Luis Suarez en 2020, y este invierno con Memphis Depay, quien ya ha marcado 3 goles en este tramo.
Por su parte, el club azulgrana firmó a Griezmann en 2019, un jugador que acabó volviendo a Madrid a petición de Simeone. Por esta operación, el club azulgrana perdió la gran parte de los 120 millones que pagaron por él. De cara al próximo verano, Joan Laporta ha puesto la mirada en Carrasco, con quien tienen una preferencia, y en Joao Félix, venta que parece asegurada.
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Jordi Alba gusta a Simeone para el lateral izquierdo
Tal y como ha informado el portal web Todo Fichajes, Simeone ha pedido a Enrique Cerezo a Jordi Alba. El catalán finaliza pronto su contrato, y en la entidad quieren deshacerse de su salario, uno de los más altos. Actualmente, el futbolista ha perdido el protagonismo que solía tener debido a la irrupción de Alejandro Balde, una de las jóvenes promesas.
Por ello, el jugador podría no estar contento y buscar una salida sería una opción, teniendo en el Atlético de Madrid la oportunidad de seguir en España. Aún tiene contrato hasta 2024, pero Laporta está dispuesto a dejarlo salir por una cantidad simbólica de unos 5 millones, un precio que se adapta a la perfección a la dinámica de fichajes que tendrá que afrontar el conjunto de Simeone.
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Jordi Alba tiene 33 años, pero nadie duda de su nivel, y es que aún ha demostrado ser una figura importante, siendo llamado por Luis Enrique para jugar el Mundial. Sería una operación más que ambos clubes cierran, y teniendo en cuenta que el Barça está interesado en dos futbolistas rojiblancos, no quieren poner impedimentos a los de Simeone.
