Lo que se esconde tras la negociación de Dani Alves con la Juventus

El futbolista del Barça se la devuelve a la junta directiva tras las tensiones vividas el año pasado

La venganza es un plato que se sirve frío. Dani Alves lleva varios meses maquinando la manera de devolvérsela a la junta directiva del FC Barcelona. Muchas semanas buscando acomodo en otro club, en otro país, donde se sienta más valorado y deje de estar en el ojo del huracán. Ha hecho historia con la camiseta del Barça y, probablemente, se irá este verano. Gratis. 

Así lo ha anunciado la Cadena Ser este miércoles por la tarde. El futbolista brasileño tiene un acuerdo verbal con el club de Turín para vestir la camiseta de la vecchia signora durante las tres próximas temporadas. Es más que los dos años, más un tercero opcional, que le ofreció el Barça el año pasado, en unas tensas negociaciones que se eternizaron. El jugador se acoge a una cláusula de su contrato con el club que le permite marchar con la carta de libertad si lo comunica antes del 5 de junio. 

Alves no ha jugado mal sus cartas. Hace un año salió a la sala de prensa de la Ciutat Esportiva a despotricar contra la actual junta directiva. A falta de un jugador de sus condiciones, la cúpula azulgrana tuvo que tragar. No le renovó por tres años, como pedía el brasileño, pero le concedió el pago de una prima de cinco millones de euros. Alves cobró y ahora dirá adiós, siempre y cuando se confirme la información de Gerard Romero.

Cuestión de dinero

Las tensiones iban en aumento ya que en la junta hace tiempo que tenían claro que debía abandonar el Barça. Era una cuestión principalmente de dinero, aunque también de comportamiento. El club destina muchos millones de euros a cubrir la masa salarial de la plantilla y «de los más caros, Alves era el más prescindible», en palabras que expuso el personal del club en su momento. La ejecutiva le invitó a salir.

Alves, orgulloso como la mayoría de futbolistas de élite, se sentía maltratado por la junta. Le sentó mal que el club emitiese un comunicado desautorizándolo [con razón, en este caso] poco después de cargar contra la prensa. Considera que no se han tenido en cuenta sus ocho años de éxito con la camiseta azulgrana, que le han menospreciado. Y en cuanto ha podido encontrar un posible acomodo, se ha tirado de cabeza a la piscina.

Se desmonta la defensa

A nivel deportivo, la probable salida de Alves preocupa en tanto que no hay un sustituto claro para su posición. El Barça podrá destinar dinero este verano a buscar un recambio que, por supuesto, tendrá un salario mucho más bajo. Pero no deja de ser una apuesta arriesgada, aunque Alves ya tiene 32 años y es evidente que se acaban sus años de fútbol.

Otro jugador que podría seguir sus pasos es Javier Mascherano, de forma que se desmontaría la mitad de la defensa azulgrana. GOL hace meses que viene informando sobre la alta probabilidad de que estos dos cracks dejen el Barça en verano.