Florentino Pérez revienta a Messi: “Me lo llevo” (o “Barça, tenemos un problema”)

El presidente del Real Madrid se la juega al argentino y al eterno rival

Florentino Pérez tiene un buen regalo para el madridismo. Y ese no es otro que Adrien Rabiot. El centrocampista del PSG lleva mucho tiempo en la agenda de los blancos. Y también en la del Barça.

Los dos clubes están luchando por ver quién se lleva al crack. Sin embargo, en las últimas horas Florentino ha movido ficha y ha dado un paso adelante en las negociaciones para acabar de cerrar su llegada. 

Una llegada que debería producirse en verano. Es muy poco probable que se cierre ahora en enero. No así en junio, cuando Rabiot, libre, salga de París. El centrocampista no ha renovado su contrato por lo que a partir del día 1 puede negociar libremente con quien quiera.

Pero en el Madrid hace tiempo que le han hecho saber que lo quieren. Y parece ser que el jugador ha acogido con buena cara la propuesta de Florentino. De ahí que el presidente blanco ya no se esconda y vaya diciendo por ahí “me lo llevo”. Algo que no le ha gustado nada a un Leo Messi que está esperando la llegada de Rabiot con ansia.

Adrien Rabiot | EFE

Rabiot, motivo de lucha entre los dos grandes

Algo que aún no es oficial. De hecho, las conversaciones entre el club merengue y el entorno del jugador han sido informales. Florentino tiene muy buena relación con Nasser AlKhelaïfi y, consciente de que Rabiot no va a renovar, ha preferido esperar hasta que las negociaciones sean ‘legales’ y ahorrarse líos con el propietario del PSG.

Unas conversaciones que en el Barça conocen. De hecho, en el Camp Nou también siguen muy atentos al futuro del francés. Abidal ya se ha reunido en más de una ocasión con su familia para hacerle ver que su mejor opción es aterrizar en la capital catalana.

El problema es que la oferta blanca es mejor. Entre otras cosas porque Florentino está dispuesto a pagar los 30 millones de prima de fichaje que está pidiendo el jugador. Algo que en el Camp Nou no tienen tan claro.

Lo peor es que eran muchos lo que daban por hecho que Adrien acabaría vistiendo la esvástica blaugrana. Ahora, con este último movimiento de Florentino, ya no está tan claro. “Barça, tenemos un problema”, apunta más de uno en el feudo culé. No le falta razón.