El castigo de Zidane que Hazard, Benzema y Sergio Ramos callan en el Real Madrid

El técnico pone en liza a un crack del equipo blanco

No está siendo nada fácil el inicio de temporada para Vinícius. De hecho, ya en el tramo final de la temporada pasada pudo ver que no lo tendría fácil con Zinedine Zidane.

El técnico nunca ha llegado a tener plena confianza en el crack. Todo lo contrario. Nunca vio en el futbolista al “fuera de serie” que le vendieron desde la cúpula. Considera que todavía le falta mucho camino que recorrer para ser ese crack que le consideran en la planta noble. Y esta desconfianza se ha manifestado desde el día que regresó Zidane.

El brasileño fue uno de los pocos jugadores que destacó la pasada temporada. El delantero fue de menos a más, siendo el único que transmitió algo de alegría a la afición.

Vinícius | EFE

Punto de inflexión

Pero a falta de unas pocas jornadas para el final de temporada Vinícius se lesionó, y tras su recuperación su vida cambió. Zizou ya estaba en dirigiendo al equipo y su protagonismo se diluyó. Quedaban solo tres jornadas y únicamente fue titular en el último choque. En los otros dos empezó en la banda. Un panorama que no ha mejorado en los últimos meses.

Primero con la llegada de Eden Hazard, que juega en su misma posición. Y es evidente quién está por delante para el técnico. Ha quedado claro desde el día que el ex del Chelsea aterrizó en Chamartín.

En siete partidos de pretemporada, Vinícius solo empezó desde el inicio en dos. En los otros cinco fue suplente. Y en lo que va de temporada oficial el carioca ha ido de más a menos. Ni siquiera la lesión de Hazard le ha permitido adquirir galones. Fue titular en el primer partido, en el que disputó 69 minutos. Pero en los dos siguientes empezó desde la banda, disputando 33 minutos contra el Celta y 16 este domingo contra el Villarreal.

El castigo de Zidane

Pero el que el brasileño se pase tanto tiempo en el banquillo no es solo fruto de que Zidane no confíe en él. La decisión del míster va más allá.

No es un secreto que Vinícius es un jugador con una vida social muy activa fuera de los terrenos de juego. Al sudamericano le gusta frecuentar los locales más de moda de la capital. De hecho, Florentino Pérez adelantó su llegada seis meses tras recibir algunos informes desde Brasil sobre la actividad del crack lejos del césped. Tenía que llegar en el mercado invernal, pero finalmente lo hizo en verano.

Y a Zidane no le gustan un pelo este tipo de actitudes. Y del mismo modo que ha dado toques de atención en más de una ocasión a Marco Asensio por este asunto (al balear también le gusta el movimiento de la ciudad), Vinícius no se escapa. O se centra en lo que tiene entre manos o Zidane no durará en mandarlo a grada.