“¿Sabes lo de Sergio Busquets?”. Sergio Ramos alucina. Isco más. Y la bomba estalla en el Barça

El ‘top secret’ que maneja el jugador culé

Sergio Busquets será el próximo en pasar por caja en el FC Barcelona. La última renovación del jugador por el club catalán data del 2016 y algunas de las cláusulas se habían quedado obsoletas. Pero esto cambiará en las próximas semanas.

Así lo aseguran desde la ciudad condal, tanto prensa como allegados al club, que conocen las condiciones del nuevo acuerdo del jugador. “¿Sabes lo de Busquets?”, preguntan alucinados los que saben de la futura situación contractual, envidiable incluso para pesos pesadísimos del Real Madrid como Sergio Ramos o Isco Alarcón.

 

El nuevo contrato de Busquets, en marcha

Según las informaciones consultadas, el representante del futbolista, Josep Maria Orobitg, ya trasladó las pretensiones de su representado. Ahora el club se encuentra estudiándolas y, si todo va sobre lo previsto, el de Badia del Vallés estampará su firma en un nuevo compromiso.

Lo hará a la vuelta de los compromisos internacionales, pues en el club quieren poder hacer la foto del jugador junto al presidente y al escudo del equipo.

Las nuevas condiciones de Busquets

Sergio Busquets está en el punto de mira| EFE

Así las cosas y si los responsables culés dan el “ok”, Busquets pasará de tener una cláusula de 200 millones a 500 ‘kilos.

Además, convertirá en fijos los dos años que tenía como opcionales a partir del 2021 y los variables de su contrato pasarán a ser una parte fija de sueldo.

Por último, percibirá un suculento premio económico por su lealtad al Barça durante tantos años, tal y como recibieron otros jugadores cuando abandonaron el equipo culé como Xavi Hernández o Andrés Iniesta.

Así, a sus 30 años, Busquets consolidará un contrato de crack. No obstante, ya puede irse poniendo las pilas el club, pues actualmente el equipo no cuenta con un sustituto de garantías para el canterano. Y pronto dejará de poder jugarlo absolutamente todo como hasta ahora. Ya el año pasado se le notó un bajón y ya se sabe que los años no pasan en balde para nadie.