Messi le pone la cruz. Luis Suárez le tiene ganas. Y Coutinho calla (de momento)

El problema del vestuario que puede saltar en Anoeta

El FC Barcelona visita este sábado Anoeta, donde se enfrentará a la Real Sociedad, un rival siempre complicado.

La temporada pasada el equipo de Ernesto Valverde protagonizó una remontada espectacular. Terminó ganando por  2-4 un partido que perdía 2-0. Pero en los últimos años siempre fue uno de los escenarios que más problemas dio a los culés.

Por eso a muchos en el vestuario del equipo catalán les ha sorprendido la convocatoria de Ernesto Valverde para la cita, en la que está Rafinha pero no Arthur Melo ni Malcom Silva. Sobre todo a los pesos más pesados y más  concretamente a Leo Messi, Luis Suárez y Phillippe Coutinho.

Arthur o el secreto de Florentino Pérez que revienta al Barça (y a Messi) | EFE

Malcom y Arthur se quedan fuera

Los tres sudamericanos no entienden porque Valverde se ha cargado a Arthur, un jugador al que hasta ha bendecido Messi, que ya es decir. El argentino  no solo le elogió en público: en privado Leo ha pedido en más de una ocasión a Valverde la presencia del brasileño en el once ocupando el lugar de Coutinho y que pase al ex del Liverpool al ataque.

Tampoco comprenden que, en caso de no poner a Coutinho en el ataque, no sea Malcom, que firmó una buenísima pretemporada, el que ocupe el tercer puesto del tridente. Y es que ha sido empezar la temporada y el ex del Girondins de Burdeos ha desaparecido del mapa. El extremo dufrió una lesión en el tobillo el pasado 3 de septiembre, pero se conoce que ya está recuperado y que podría entrar en la dinámica dle grupo. No se comprende la marginación al carioca. 

Messi y Suárez alucinan con Dembélé

Y mucho menos entienden que el Txingurri siga insistiendo por Ousmane Dembélé en la banda cpomo tercer miembro del tridente.

 Al margen de no ser un efectivo que se entienda del todo con Messi y Suárez y de tener un estilo completamente diferente a lo que se busca en el Barça, el francés aporta detalles interesantes en algún momento de los partidos, pero son demasiado esporádicos y tampoco es un futbolista que o de todo hasta el minuto 90.

Mucho ojo con lo que pase en Anoeta porque si el equipo se deja algún punto por el camino pueden saltar chispas.