Messi calienta el clásico con un ‘off the record’ que arrasa en el Real Madrid

La estrella del Barça manda un mensaje brutal al vestuario azulgrana

Se palpa la tensión. Este sábado 23 de diciembre se juega el partido de los partidos. El gran clásico del fútbol español promete ser apasionante.

El Barça visitará al vigente campeón de Liga, el Real Madrid, que llega a la cita pletórico tras tumbar al Gremio en la final del Mundial de Clubes.

Los azulgrana también llegan muy fuertes, después de golear al Deportivo más en juego que en el resultado final (4-0). Sin embargo, tienen menos urgencias.

Los de Ernesto Valverde son líderes solventes de la Liga y ya sacan 11 puntos al Madrid, que tiene un partido menos. Eso es una motivación para los blancos.

Cristiano Ronaldo ya estaba pensando en el clásico nada más levantar la copa del Mundialito:Creo que vamos a hacer un partidazo”. Se sienten más fuertes.

Sin embargo, Leo Messi también está confiado. Sabe que el Barça de Valverde es mucho más consistente detrás, aunque hay que poner su fiabilidad a prueba contra un grande.

El argentino tiene ganas de volver a reventar el Bernabéu, como hizo el año pasado, celebrando el gol de la victoria (2-3) mostrando su camiseta a la afición.

Los precedentes de la última década son favorables al Barça, pero esta vez apelan a la prudencia. Quieren atar la Liga como sea y ello implica ser un punto conformistas.

Messi se conforma con un empate

Tanto es así que Messi ha mandado un mensaje contundente al vestuario: lo importante es asegurar un buen resultado. No hay que volverse loco.

El astro argentino ha confesado que se conforma con un empate en el Bernabéu porque la situación ya es más que favorable para los intereses del Barça.

Pero también sabe que los blancos saldrán a ganar desde el primer minuto y hay que estar tensos y muy preparados. Especular puede ser un problema.

Hay que ir a por el partido con precaución. Guardando muy bien las espaldas para tratar de aprovechar el momento de dar la puñalada letal. Y así lo intentarán.

En el Madrid alucinan con esta versión más conservadora de Messi, un competidor nato y ganador incansable. Pero lo achacan al Mundial: cuanto antes ganen la Liga, menos carga de partidos tendrán por delante.