“Es muy malo”. Messi manda un crack para casa (y Luis Suárez lo remata)

El astro argentino sufrió como nunca viendo el Barça por televisión

Leo Messi pidió permiso para perderse el Levante-Barça del pasado domingo. Así como Luis Suárez descansó en el Barça-Villarreal, el astro argentino se libró del desplazamiento a Valencia.

Es una realidad que la cabeza de Messi está puesta únicamente en el Mundial de Rusia, además de su familia. Y este fin de semana pudo aprovechar para estar con los suyos.

Sin embargo, desde su entorno comentan que sufrió mucho al ver la derrota contra el Levante. El equipo fue un coladero. Falta mucho por mejorar.

Especialmente decepcionado quedó Messi con Nelson Semedo, un futbolista que apuntaba maneras y llegó avalado por Carles Puyol.

Sin embargo, el lateral portugués está muy lejos del rendimiento que ofrecía Dani Alves. No hay manera de encontrar un recambio de garantías.

Sergi Roberto es lo más parecido al brasileño de lo que ha pasado en los últimos años. Jugadores como Montoya, Douglas y Aleix Vidal fracasaron estrepitosamente.

Roberto jugó de lateral en un experimento de Luis Enrique, pero a la hora de atacar demostró unas cualidad de las que los demás carecen: buena y solvente conducción con el balón, fabulosos centros a sus compañeros e inteligencia.

La carencia de Roberto es más bien defensiva, aunque ha mejorado mucho en posicionamiento táctico. Algo que Semedo todavía no tiene.

En cambio, Roberto sufre todavía para defender a grandes cracks que dominan el regate y son veloces. Sergi es rápido, pero no tanto. También le falta fuerza todavía.

Sin embargo, Semedo demostró contra el Levante no estar centrado y tampoco ser fuerte: Boateng lo tumbó. La conclusión del mejor amigo de Messi, Luis Suárez, es clara: “Es muy malo”.