El acuerdo multimillonario que podría permitir al Barça acometer grandes fichajes

Laporta trabaja en patrocinios que darían al club catalán una mayor solvencia económica

Joan Laporta Barça betis
Joan Laporta Barça betis

El Barça atraviesa una crisis económica sin precedentes en su historia. Esto es un hecho.  El conjunto azulgrana pasar por su peor momento financiero, algo que, de forma inevitable, ha derivado hacia una crisis deportiva sobre el terreno de juego. Una situación en la que la directiva culé trabaja sin descanso, con el objetivo de revertir esta situación lo antes posible.

Una situación económica insostenible

No obstante, se trata de un trabajo arduo y complejo, ya que el músculo financiero del Barcelona quedó muy tocado tras el mandato de Bartomeu, que dejó a la actual directiva con una papeleta muy difícil de solventar, con unas cuentas que no salían y sin activos deportivos o económicos que puedan revertir la situación.

Los dos principales factores que han llevado al club blaugrana a esta situación han sido en primer lugar, los traspasos a precios desorbitados que terminaron por ser un fracaso, como son los casos de Coutinho y Dembélé. Y, en segundo lugar, las altísimas fichas, imposibles de mantener, a una gran cantidad de los jugadores del primer equipo.

Es por ello que, ante la imposibilidad de subsanar la complicada situación económica con las herramientas que existen dentro del propio club, la cúpula culé ha puesto sus ojos en los patrocinios como vía principal para poder recuperar el músculo económico de antaño.

Y es que este verano también promete ser movido en Can Barça en lo que se refiere a estos patrocinios, puesto que son contratos con sus dos principales patrocinadores, Rakuten y Beko, caducan este 30 de junio, y todo parece indicar que no serán renovados.

Leo Messi
Leo Messi.

Es por ello que son muchas las marcas interesadas en poner su nombre en la camiseta del conjunto azulgrana. Algo que es lógico, ya que, a pesar de la salida de Messi, un atractivo indudable y una máquina de vender camisetas, el Barça sigue siendo el club deportivo con más seguidores en la suma de todas las redes sociales, por lo que sigue teniendo un gran tirón a lo ancho y largo del mundo, a pesar de no contar entre sus filas con el argentino.

Y esto es algo que Joan Laporta quiere aprovechar para obtener un rédito económico y firmar un contrato que esté a la altura de los patrocinios mejor pagados de la historia del deporte. Algo que, de llevarse a cabo, supondría una inyección en lo financiero para el conjunto culé que le permitiría subsanar en gran medida la deuda, y quién sabe si incluso acometer alguna gran operación de mercado.

Dos empresas en la pole

Y el primero de los mercados en el que se ha fijado el Presidente culé es uno de los que se encuentra en mayor crecimiento en la actualidad: las criptomonedas. Un mercado que, a pesar de su reciente nacimiento, se está haciendo con un hueco importante en la economía a nivel mundial.

Y una de las empresas que más interés ha mostrado en vestir al conjunto catalán es VeganNation, una empresa americana en auge basada en la sostenibilidad del planeta, cuya criptomoneda busca construir una “economía verde”.

Sin embargo, en las últimas horas, quien parece haberse consolidado en la pole por convertirse en el principal patrocinador del Barça, es Spotify, la empresa sueca de reproducción de música vía streaming.

Camp Nou.

En Catalunya Radio hablan de un gran interés por parte de la empresa sueca, que habría puesto sobre la mesa del conjunto culé una de las mayores ofertas de la historia del fútbol. No obstante, es una opción que, a pesar de la gran cuantía económica que le aportaría al club catalán, no termina de convencer a todos.

Y el motivo no es otro, sino que la empresa no solo busca incluir su nombre de la empresa en el frontal y la espalda de la camiseta, sino que también quiere hacerse con los title rights del conjunto culé. ¿Qué significa esto? Que cambiaría el nombre del estadio, que pasaría a llamarse Camp Nou Spotify.

Una opción que mantiene las opiniones divididas entre los que creen que el nombre del estadio no debería tocarse, y los que piensan que la inyección económica que le supondría al club es mucho más importante que cualquier nombre.