El feo de Gareth Bale en el vestuario del Real Madrid llega a Florentino Pérez

El comportamiento del galés después del choque no fue del todo ejemplar

No fue, ni de lejos, el peor partido de Gareth Bale. El galés dio la asistencia a Cristiano Ronaldo en el primer gol y se le vio más participativo que en encuentros anteriores.  Pero el atacante volvió a ser víctima de la falta de puntería y fue claramente de más a menos a media que pasaban los minutos. El futbolista se fue hundiendo poco a poco.

Además, el gran partido que firmó Cristiano en su regreso después de la sanción de cuatro partidos que le cayó por empujar a De Burgos Bengoechea en la ida de la Supercopa de España  ante el FC Barcelona (1-3).

En el punto de mira

Con todo, la actuación del británico, aunque no la peor, volvió a dejar mucho que desear. Tanto es así que la grada del Santiago Bernabéu no le perdonó. Los aficionados presentes en el estreno en la Champions League del actual campeón le dedicaron una sonora pitada cuando Zinedine Zidane decidió sustituirlo en el minuto 82 por Borja Mayoral.

El futbolista se sentó en el banquillo con rostro serio y esperó al pitido final para enfilar rápidamente el camino al vestuario.

Allí se mostró contrariado, mosqueado consigo mismo, con el míster por el cambio y con afición por la bronca. Una situación que dejó ensimismado al futbolista, que no medió palabra y se fue el primero sin abrir boca.

Un gesto que rápidamente llegó a Florentino Pérez, que empieza a estar nervoso con la situación del delantero.

Paciencia

El presidente esperaba que Bale poco a poco fuera recuperando su mejor versión, y de hecho le pidió a Zidane que lo alineara en todos los partidos en los que estuviera disponible con tal de mejorar su rendimiento y revaluar a un jugador al que toda Europa ve que sigue muy lejos de su mejor versión.

Los responsables seguirán dando margen a Bale. Las intenciones de los mandataros es recuperar lo mejor del futbolista antes del próximo verano para así poder darle salida a un precio parecido al que el Madrid pagó al Tottenham pr sus servicios en el 2013.

Una decisión que tiene algo mosqueados a varios cracks del equipo, que temen que Bale se convierta en un lastre de cara al objetivo de ganarlo todo que tiene el Madrid esta temporada.