Mino Raiola ofrece a Gianluigi Donnarumma a Joan Laporta
Donnarumma no está satisfecho en el PSG y ha sido ofrecido al Barça
Gianluigi Donnarumma era una de las grandes gangas del pasado mercado estival. Su contrato con el AC Milan expiraba, y tenía a los mejores clubes del continente siguiendo sus pasos. Entre ellos, se colocó a Chelsea, Barça, Real Madrid, Juventus de Turín, Bayern de Múnich… pero finalmente acabó escogiendo al Paris Saint-Germain. Allí, le prometían un proyecto ganador, y sobretodo, un sueldo que nadie más le ofrecía.
Así que se decantó por marcharse al cuadro entrenado por Mauricio Pochettino, siguiendo los pasos de otras estrellas como Leo Messi, Sergio Ramos, Achraf Hakimi o Georginio Wijnaldum. El internacional italiano, que fue el MVP de la Eurocopa, que conquistó con su selección, aterrizó con grandes expectativas en el Parque de los Príncipes, y esperaba ser muy importante. No obstante, sus primeros meses están siendo sumamente decepcionantes.
Los resultados que está cosechando el PSG son demasiado irregulares, y, en especial, lo que más enfada al portero de 22 años, es el hecho de que sea suplente habitual. Se ha tenido que ir alternando con Keylor Navas, cuando Nasser Al-Khelaïfi le prometió, a la hora de firmar su contrato, que el costarricense no saldría del banquillo, e intentarían traspasarle a otra entidad. Se siente engañado y defraudado con el jeque, y por eso piensa en salir.
‘Gigi’ quiere aterrizar en un club en el que sea un fijo, y ha pedido a Mino Raiola que vuelva a buscarle destino. Y aquí es donde ha aparecido el Barça, que piensa muy seriamente en traspasar a Marc-André ter Stegen, que no está dando la talla. Joan Laporta está francamente decepcionado con el alemán, y se está hablando muy seriamente de la posibilidad de que se vaya.
El nombre de Donnarumma está en el radar culé, y es una opción que agrada especialmente a Xavi Hernández.
El problema: el precio
Donnarumma no vería con malos ojos aterrizar en el Camp Nou, a sabiendas de que allí sería un fijo en las alineaciones. El único obstáculo es el hecho de que desde el Parque de los Príncipes no están por la labor de dejarle salir.
Y, para aceptar su fuga, pedirían una cantidad de dinero demasiado elevada a cambio.
