Hazard tiene los días contados en el Real Madrid: Florentino Pérez acepta

El presidente del Real Madrid Florentino Pérez ya no esconde que la salida de Eden Hazard es lo mejor para el club blanco

Eden Hazard
Eden Hazard

Florentino Pérez no es un tipo que suela reconocer sus errores abiertamente. Más bien todo lo contrario. Sin embargo, como apuntan desde el entorno del presidente del Real Madrid, el máximo responsable del club blanco no tiene inconveniente en reconocer que el fichaje de Eden Hazard ha sido una de las peores decisiones que ha tomado en los últimos años.

Entre otras cosas porque el rendimiento del belga ha sido más que nefasto. Fue Zinedine Zidane el que, viendo que en el Chelsea Hazard se estaba saliendo y que al Madrid le faltaba un crack arriba tras la salida de Cristiano Ronaldo, puso no nombre encima de la mesa.

Florentino, que siempre estudia a los jugadores antes de dar el ok definitivo, veía ya que los informes que le llegaban no eran precisamente los de un jugador que tuviera en el cuidado físico una de sus prioridades.

Florentino Pérez toma una decisión con Hazard

Eso sí, a diferencia de sus años en Londres, done apenas se lesionaba, la mala suerte se ha cebado con el belga en este sentido. Sin embargo, tras temporada y media viendo cómo, además de caer lesionado de forma recurrente, su juego no es que sea brillante y además su implicación física es mínima, el presidente ha aceptado que lo mejor para las dos partes es que Eden haga las maletas.

Eden Hazard
Eden Hazard

Entre otras cosas porque es, ojo, el jugador mejor pagado de la plantilla. Con un Madrid que necesita sí o sí reducir gastos, ya hay quien asegura que Pérez, aunque acabe siendo una operación ruinosa, prefiere vender a la baja a Eden y recuperar parte de los casi 150 millones que se pagaron por el belga.

Un Hazard que tiene ahora un valor de mercado según Transfermarket de, ojo, tan sólo 50 millones de euros. Y cayendo. Con el Madrid buscando sanear sus cuentas, la salida del belga puede ayudar mucho en este sentido viendo, además, que en el terreno de juego tampoco se le echará mucho de menos.