¡Hay bomba! Y es de Messi. Florentino Pérez la suelta: ¡Tocado y hundido!

​Florentino Pérez ha soltado una bomba que ha dejado a muchos en el Santiago Bernabéu con la boca abierta. De hecho, ha provocado muchas sonrisas. Y es que, como también saben ya muchos otros presidentes de los grandes clubes de Europa, los rumores no paran de crecer en torno al futuro ganador del próximo Balón de Oro.

Unos rumores que han llegado desde Italia y que sitúan ni más ni menos que a Cristiano Ronaldo como el ganador. Obviamente desde France Football, la revista que entrega el premio, no han dado ningún dato ni ninguna información que confirme estos rumores.

Sin embargo, varios medios italianos consideran que no es precisamente casual que sea el luso el protagonista de una entrevista que se ha publicado hoy mismo. ¿Es mera casualidad o el prestigioso medio galo ya está dando pisas? Ahí es donde muchos discrepan.

Varios nombres importantes del mundo del fútbol, entre ellos el presidente del Real Madrid, apuntan a que es una pista más que clara. Algo que ha llegado también a Leo Messi y que, como era de esperar, no le ha hecho especialmente gracia.

La bomba que destroza a Leo Messi

Y es que, por mucho que Leo siempre haya asegurado por activa y por pasiva que prioriza los títulos de equipo por encima de los galardones individuales, ver como Cristiano Ronaldo gana su sexto Balón de Oro (si es que los rumores acaban siendo ciertos) y se coloca por encima, no le haría ninguna gracia.

La lucha de Messi con Cristiano ha sido una de las más bestias en la historia del fútbol. Muchos son los que consideran a Leo Messi el mejor jugador de la historia.

Si bien es cierto que nadie se atreva a decir lo mismo del jugador de Madeira, sí que el hecho de tener en su palmarés un hipotético Balón de Oro más echaría por tierra muchos argumentos de los defensores del argentino.

Y Leo lo sabe. Sabe que debe ganar un Balón de Oro más para seguir estando un paso por delante. Con las cifras en la mano, el luso y el de Rosario están muy igualados. Las diferencias llegan en el césped donde, muchos jugadores y entrenadores tanto actuales como históricos aseguran que como el capitán del Barça no ha habido ninguno.

Pero, con el tiempo, cuando pasen los años, no serán pocos los que se acabarán basándose en trofeos como el que entrega France Football para elegir al mejor. Y si es del de la Juventus quien se acaba llevando el de este año, el drama en casa de los Messi podría ser enorme. Un tocado y hundido en toda regla.

Un futuro incierto

De momento faltan aún semanas para que se sepa quién es el ganador oficial, pero que desde Italia den por hecho que será Cristiano no le hace ninguna gracia al ‘10’ culé. Un Ronaldo que, de hecho, ha hablado de su rivalidad con Leo en la entrevista de la citara revista gala.

“Mucha gente dijo que nos alimentábamos el uno al otro. Que estar el uno frente al otro en España nos ha permitido ser mejores, tener mejores actuaciones y eso es sin duda verdad. En el Madrid sentía más cerca su presencia, lo que me daba un poco más de presión que en el Manchester. Desde un punto de vista, fue una rivalidad saludable, el símbolo de los dos clubes, el Madrid y el Barça. Creo que ha dicho recientemente que me echaba de menos en el plano competitivo, pero más allá de eso mi motivación no depende de otros. Yo quiero estar en lo más alto siempre”, apunta.

Y eso es algo que Leo teme. Ese “quiero estar en lo más alto siempre” es algo que Messi sabe muy bien. El problema para el argentino es que van pasando los años y, viendo como está jugando este Barça, parece difícil ver al de Rosario levantando otra Champions, una competición que siempre suele ser determinante.

Si el luso se acaba llevando este año el prestigioso galardón, será muy difícil que el argentino pueda levantar otro. Al menos si los culés siguen naufragando en Europa como lo han hecho en los últimos años.

De ahí que no sean pocos, y más sabiendo que Messi tiene una cláusula en su contrato por la cual puede abandonar el Barça cuando quiera, los que aseguren que el futuro de Leo en el Camp Nou es cada vez más incierto.