Coutinho o “No juegas”. Valverde seca a un titular del Barça por orden de Messi

El astro argentino se cansa de la situación

Messi se ha cansado de juegos y se lo ha dejado claro a Ernesto Valverde. El argentino está harto de la situación de Ousmane Dembélé y le ha dicho al técnico que hasa aquí. También Luis Suárez. 

La dupla del Barcelona dejó claro al ‘Txingurri‘ que el tridente del Barça era uno: ellos dos y Coutinho. A ‘Dembe’ no lo quieren volver a ver en un partido a cara o cruz, y sólo regresará al once, como titular, para dar descanso a los puntales, antes lesiones y sanciones, y en partidos de ‘medio pelo’. Más claro, agua.

Y es que la actitud del delantero francés está dejando mucho que desear esta temporada. Y su rendimiento en el terreno de juego tampoco ayuda. Dembélé va de mal en peor y tiene los días contados en la Ciudad Condal.

Ousmane Dembélé | EFE

En las redes sociales ha sido uno de los temas que mayor interés han suscitado. Y en numerosos comentarios los aficionado del Barça avisan: «Dembélé, no juega más». Y no van mal.

La famosa gastroenteritis

La situación de ‘el mosquito’ dio un giro bastante feo el jueves pasado. Valverde le esperaba en el entrenamiento, pero este no apareció. Nadie sabía nada de él. Tardaron más de hora y media en localizarlo.

Finalmente, algunos empleados del club lograron averiguar que se encontraba en su domicilio y hablaron con él. El atacante galo achacó su ausencia a una supuesta gastroenteritis. Unas horas más tarde, lo confirmaron desde el propio Barça. El viernes tampoco se entrenó. Y el problema es que no era, ni es,  la primera vez que al francés le tapaban las vergüenzas en el vestuario.

La gota que colmó el vaso

Con los ánimos caldeados, Dembélé la volvía a líar. Esta vez en el Barça-Betis. A pesar de toda la tensión que se respiraba en el club por el episodio vivido unos días atrás, el galo se dio el lujo de volver a llegar tarde. 

El Barcelona-Betis estaba a punto de arrancar y todas las miradas apuntaban al palco, donde se buscaba al joven futbolista francés. Pero allí no había nadie. Ousmane no estaba. 

Con el 0-2 ya en el marcador, Dembélé llegó al Camp Nou para ver la segunda parte. Un nuevo retraso que ha sido la gota que ha colmado el vaso, y un desplante que ha corrido como la pólvora en el vestuario culé.

En el club están ya hartos de la actitud del francés. Lo del domingo fue una falta de respeto, que parece que no quedará impune: las horas de Dembélé en el Barça, afirman desde dentro, están contadas. En junio se lo buscará destino. Aunque el problema apunta a gordo: nadie paga ni la mitad de lo que el Barça soltó al Borussia Dortmund por un juador al que Messi y compañía le han puesto la cruz y no quieren en el césped.