Casemiro amenaza con irse si se confirma la operación de Ancelotti: jugador franquicia para el puesto en el Real Madrid

El centrocampista brasileño del Real Madrid duda de su continuidad ante el panorama que se le presenta en la capital

casemiro
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David Alaba es a día de hoy la única nueva incorporación del Real Madrid para el proyecto de Carlo Ancelotti. El defensa austríaco fue presentado esta semana en las instalaciones de la entidad madridista y llega para cubrir el hueco dejado por Sergio Ramos.

Además, el futuro de Raphaël Varane sigue en el aire. El central galo está cada vez más cerca del  Manchester United. Con lo que Alaba debería ser la nueva referencia y el nuevo líder de la zaga.

Ancelotti no descarta a Alaba como medio centro

Sin embargo, no está tan claro que este vaya a ser su papel principal. Sobre todo su Varane se acaba quedando en el equipo. El técnico italiano ya lo probó en algunos partidos como medio centro defensivo cuando ambos coincidieron en el Bayern de Múnich en las temporadas 16-17 y 17-18, obteniendo resultados muy positivos. Y no descarta darle este mismo papel en el Madrid. No en cada partido, pero si en partidos de menor nivel como muchos de la Liga.

David Alaba
David Alaba

Una idea que no gusta un pelo a Casemiro. El brasileño nunca ha sido del agrado de Ancelotti. Así lo demostró en la primera etapa del míster italiano, en la que el centrocampista protagonizó un rol secundario. Y Casemiro no quiere revivir aquel panorama.

Casemiro toma la palabra

Porque Casemiro quiere jugarlo todo, sean los partidos más importantes o los menores. Y si no es el titular indiscutible en el conjunto blanco, no tendrá problemas en levantar el teléfono y escuchar algunas de las ofertas que tiene sobre la mesa. Y ojo, porque una de ellas proviene del Paris Saint-Germain.

Las intenciones de Casemiro pasan por seguir cumpliendo en el Madrid con el papel que ha tenido en los últimos años. Pero si percibe que Ancelotti pretende repartir sus minutos con Alaba, podría forzar la máquina para salir antes del 31 de agosto. Y aunque probablemente no conseguirá su cometido, pues la última palabra la tiene Florentino Pérez, al menos habrá puesto sobre aviso al club, al presidente y al técnico.