Florentino Pérez cuenta el fichaje que hará el Barça en enero (y hay sorpresa)
El presidente del Real Madrid y la bomba azulgrana para el mercado de invierno
Florentino Pérez ya sabe que jugador vestirá de azulgrana una vez hayan pasado las navidades. Ha llegado a oídos del presidente del Real Madrid que el Barça ya tiene todo cerrado con un crack.
Con la lesión de Samuel Umtiti y la más que probable salida de Javier Mascherano, el club catalán va a ir a por un central que refuerce la débil defensa de Ernesto Valverde. Un Valverde que, con la baja del argentino, tan sólo tendrá a tres centrales a su disposición.
Gerard Piqué, Thomas Vermaelen y el lesionado Umtiti. De ahí que el Barça haya acelerado la operación que hará que Yerri Mina aterrice en el Camp Nou antes de lo previsto.
Cambio de planes
Hasta hace pocos días, el plan que habían trazado Bartomeu y la secretaría técnica era espera al verano para que el central colombiano se incorporara a la disciplina culé. Pero la lesión de Umtiti ha precipitado los acontecimientos.
El problema que tiene en el Camp Nou es que la opción preferente de compra que tiene el club por Yerri está contemplada para el verano de 2018. El defensa dejaría la liga brasileña a cambio de 9 millones de euros.
Con el jugador ya lo tiene todo pactado. Se muere de ganas de cruzar el charco y jugar junto a Piqué y los demás, pero debe ser el club carioca quien dé el ok a su marcha antes de lo previsto.
La sorpresa
Pero lo que realmente ha sorprendido a Florentino Pérez no es la llegada del defensa, sino el hecho de que éste vaya a ser la única incorporación en el mercado de invierno para el club blaugrana.
Valverde es consciente que a la plantilla no le irían nada mal algunos refuerzos más, sobretodo en la delantera, pero considera que es mejor esperar a ver cómo evoluciona la temporada y guardar los millones para alguna operación veraniega.
No quiere precipitarse con algún fichaje de última hora que acabe saliendo rana. Mina saldrá barato y ayudará a apuntalar la defensa, de ahí su contratación. Pero el Txingurri no quiere grandes operaciones, al menos, de momento.
