El United se lanza a por un jugador del Madrid y el club se plantea su salida

El club inglés anda detrás de un futbolista blanco y su salida podría ser una realidad

Florentino Pérez Real Madrid
Florentino Pérez Real Madrid

El Manchester United ha entrado con fuerza en la recta final del mercado de fichajes con un objetivo muy claro: Eduardo Camavinga. El talentoso mediocampista francés del Real Madrid, que apenas tiene 22 años, se ha convertido en el gran anhelo de Rúben Amorim para fortalecer el centro del campo de los red devils antes de que cierre la ventana de fichajes. El técnico portugués ve en el exjugador del Rennes la pieza perfecta para su formación 3-4-2-1, un futbolista que puede aportar energía, equilibrio y criterio al doble pivote junto a Casemiro.

Sin embargo, la situación no es sencilla. Camavinga tiene contrato hasta 2029 y es considerado fundamental por Xabi Alonso, pero en el Madrid son conscientes de dos factores: sus problemas físicos recurrentes y la intensa competencia que enfrenta en su posición. Con el United dispuesto a presentar una oferta cercana a los 80 millones de euros, en la cúpula blanca comienzan a considerar seriamente esta operación.

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Amorim presiona por un refuerzo clave

El United ha estado buscando durante semanas un mediocampista organizador que complemente a Bruno Fernandes y mejore la salida de balón. Después de descartar a Carlos Baleba (Brighton) por su alto precio y a Adam Wharton (Crystal Palace) debido a la negativa de su club a negociar, la directiva de Old Trafford ha puesto todos sus esfuerzos en Camavinga.

Amorim está convencido de que el francés es justo lo que su equipo necesita. La reciente derrota ante el Arsenal dejó claro que hay un desbalance en el mediocampo y que se requiere un jugador que pueda mantener el ritmo físico del equipo. Con 150 millones de euros destinados a dos fichajes, la incorporación de Camavinga se ha convertido en una prioridad absoluta.

El United está dispuesto a ofrecer hasta 80 millones, una cifra que en Madrid consideran el mínimo para comenzar a negociar. En Inglaterra, piensan que el francés no solo fortalecería el presente del equipo, sino que también sería una inversión a futuro gracias a su juventud y experiencia internacional. En este contexto, la presión de Amorim y la situación de Camavinga han generado un debate interno en el Bernabéu.

Dudas en Madrid y un futuro abierto

En el Real Madrid, hay mucha confianza en Camavinga, aunque su futuro no está completamente garantizado. Sus estadísticas respaldan su rendimiento: 41 partidos oficiales la temporada pasada, un 89% de precisión en los pases y más de seis recuperaciones por partido. Sin embargo, las lesiones recurrentes, la más reciente, un esguince de tobillo que lo dejó fuera del debut liguero contra Osasuna, han generado dudas sobre su continuidad.

Además, la competencia en el centro del campo es realmente intensa: Jude Bellingham, Aurélien Tchouaméni, Fede Valverde, Arda Güler y Dani Ceballos. Xabi Alonso tiene varias opciones a su disposición, y el francés ha perdido algo de protagonismo en los últimos meses. Aunque el técnico aprecia su capacidad física y su habilidad para iniciar jugadas desde la defensa, la necesidad de minutos y la presión de un club como el United podrían influir en su decisión.

La postura de la directiva blanca es bastante clara: el jugador no está en venta a menos que llegue una oferta muy atractiva. Sin embargo, fuentes cercanas al club indican que una propuesta cercana a los 80 millones sería difícil de rechazar, no solo por el beneficio económico, sino también por la oportunidad de reinvertir en otros fichajes. En este escenario, Camavinga jugará un papel crucial. Si logra recuperarse y consolidarse como titular en los próximos partidos, el Madrid no se moverá. Pero si las lesiones y la falta de minutos continúan, la tentación de aceptar la oferta inglesa podría volverse una realidad.

Este culebrón promete extenderse hasta el último día del mercado. El United ha dado el primer paso, y ahora todo depende de la respuesta del Madrid y del propio Camavinga, quien se encuentra en un momento decisivo para su futuro inmediato.

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