El factor determinante que ha llevado a Endrick a decidirse por el Real Madrid

El efecto colateral de la hipotética llegada de Endrick es el compromiso de no volver a intentar el fichaje de Erling Haaland

Florentino Pérez Real Madrid
Florentino Pérez Real Madrid

Ya es una realidad. El Real Madrid parece haber ganado la carrera por hacerse con la que apunta a ser la próxima gran estrella del panorama futbolístico internacional, Endrick Moreira. El conjunto blanco, liderado por Florentino Pérez y apoyado por su equipo de scouting, ha logrado convencer al futbolista brasileño y a su entorno de que la opción idónea para desarrollar su carrera en el fútbol europeo, es el Santiago Bernabéu.

Una operación que ha consistido en una carrera de fondo en la que todos los grandes clubes europeos han estado involucrados. El Real Madrid estuvo en la puja desde el primer minuto, pero hubo otros, como el Paris Saint-Germain e incluso el Barça, que hicieron grandes esfuerzos para que el carioca se decantase por ellos en lugar del conjunto blanco.

Una decisión firme e irrevocable

Sin embargo, finalmente ha sido el equipo de Florentino Pérez el que se ha llevado el gato el agua, no sin un gran trabajo detrás. Y es que, por momentos, otros equipos estuvieron muy cerca de llegar a un acuerdo con su club, Palmeiras, y con el propio futbolista. Es el caso del PSG, que parecía tener todo acordado con el joven delantero, sin embargo, en el último momento, el conjunto brasileño rechazó la oferta del club francés, haciendo que este se retirase de la puja.

Hoy mismo se ha confirmado, de la mano de la prensa brasileña y de algunos de los periodistas más fiables a nivel internacional, que el fichaje de Endrick por el Real Madrid es ya una realidad, y que solo falta la firma, un mero formalismo para confirmar que, en efecto, es el conjunto blanco quien se ha hecho con la próxima gran promesa del fútbol brasileño. Son varios los factores que han llevado al futbolista y su entorno a decantarse por el conjunto blanco, pero uno de ellos ha sido fundamental en su decisión.

La clave que ha llevado a Endrick a vestir de blanco

Un factor que tiene nombres y apellidos: Erling Haaland. El futbolista noruego fue, durante varios meses, muy vinculado a la disciplina blanca. De hecho, el crack noruego y su entorno llegaron incluso a visitar las instalaciones deportivas del Real Madrid este mismo año. No obstante, finalmente, el astro nórdico se decantó por el Manchester City, dejando a un lado la oferta del conjunto blanco.

Mucho se ha especulado en torno a la cláusula de rescisión del contrato de Haaland, que le permitiría abandonar el conjunto sky blue en 2024 o 2025 por una cantidad pactada de dinero. Una teoría que llevaría al Real Madrid a estar en la pole position para vestir al noruego de blanco para entonces. Algo que, según parece, no ocurrirá. Y es que Endrick tiene claro que su futuro pasa por no competir con otro de los mejores del mundo en su misma posición, mientras que el conjunto blanco también lo tiene claro: Endrick es el futuro.

Y es que otro importante aspecto a remarcar es que el futbolista brasileño, de tan solo 16 años, no podría aterrizar en Madrid hasta su mayoría de edad, según la normativa de la FIFA. Esto supondría que no llegaría al Santiago Bernabéu hasta la temporada 2024/25. Fecha clave en la que el contrato de Haaland le permitiría abandonar Manchester y poner rumbo a Madrid.

Una opción que desde su entorno parecía estar pautada, pues el padre del noruego, Alf-Inge Haaland, siempre aseguró que su hijo no estaba dispuesto a desarrollar su carrera en un solo club, dejando la puerta abierta al conjunto blanco en un futuro. Una opción que, a falta de la confirmación del fichaje de Endrick, parece cada vez menos viable, dada la firme apuesta del Real Madrid por el punta carioca como referencia ofensiva de cara al futuro.

Una promesa clave a la hora de convencer al brasileño para vestir la camiseta del Real Madrid, garantizándole así un protagonismo absoluto en el ataque blanco de aquí a la próxima década. Una decisión que tiene un efecto colateral más que evidente sobre el futuro de Haaland, que, salvo sorpresa, ve como se desvanece su sueño de vestir de blanco. Y es que, algo con lo que el noruego no contaba, es que el tren rumbo al Bernabéu, difícilmente pasa dos veces.