Estas son las cuentas de España para pasar a octavos de final del Eurobasket

El grupo C del Eurobasket 2025 se ha convertido en uno de los más imprevisibles del campeonato. El triunfo de Bosnia ante Grecia (77-80) ha sacudido la clasificación y deja a dos selecciones ya confirmadas para octavos, Grecia e Italia, sellando estos últimos su billete ante los nuestros, mientras que España, Bosnia y Georgia se disputan los dos billetes restantes en una última jornada cargada de tensión.

Tras caer frente a Italia (67-63), la Selección española llega con un balance que obliga a hacer cuentas. Aun así, el conjunto de Sergio Scariolo mantiene un mensaje claro: depende de sí mismo para lograr el pase. Una victoria frente a Grecia, este jueves a las 20:30, bastaría para asegurar su presencia en la siguiente ronda.

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España aún depende de sí misma… y también de Georgia

La primera opción es la más sencilla: si España vence a Grecia, estará en octavos sin mirar otros resultados. El triunfo le otorgaría, como mínimo, la cuarta plaza del grupo y por tanto el billete a las eliminatorias. No obstante, el escenario no se limita a ese supuesto. España podría incluso clasificarse perdiendo, siempre que el partido que se juega horas antes, el Bosnia-Georgia, que se disputará a las 14:00 horas, sonría a los intereses españoles.

Si Georgia logra derrotar a Bosnia, la Selección conservaría opciones de seguir adelante aunque caiga frente a Grecia. Sin embargo, el riesgo que conllevaría la derrota de La Roja es evidente, puesto que, si España pierde y Bosnia gana, el combinado nacional se vería abocado a la quinta plaza y, por tanto, a la eliminación en la misma fase de grupos del torneo.

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Con todo ello, es evidente que la Selección no puede optar al primer puesto, pero sí puede terminar segunda, tercera, cuarta o quinta. Para ello, hay varias combinaciones posibles en función de los resultados. La primera de ellas es la más evidente: España será segunda si vence a Grecia y, además, Bosnia derrota a Georgia en el primer partido del día. Existe otra vía, más complicada: si Georgia gana a Bosnia, entonces España necesitaría batir a Grecia por 28 puntos o más para escalar hasta la segunda plaza.

En el segundo caso, España será tercera si se impone a Grecia, pero con un margen de hasta 27 puntos, y Georgia consigue derrotar a Bosnia. Existe un tercer supuesto en el que España caería a la cuarta posición si pierde frente a Grecia y Georgia derrota a Bosnia. Y por último, siendo este el peor de los casos, España quedaría quinta y por tanto eliminada si la derrota ante Grecia se combina con un triunfo bosnio sobre Georgia.

La importancia del Bosnia-Georgia y los posibles rivales en octavos en caso de clasificarse

Aunque todas las miradas están puestas en el choque ante Grecia, el Bosnia-Georgia de la tarde es clave para entender las posibilidades españolas. La victoria de Bosnia no solo le mantendría con vida, sino que complicaría al máximo la situación de España, que estaría obligada a ganar sí o sí para no despedirse de la competición.

Ahora bien, en caso de obtener el pase a los octavos, la posición final en el grupo no es un mero detalle estadístico: determina los cruces de octavos. Si España logra ser segunda, podría enfrentarse a un tercero de otro grupo, un rival teóricamente más asequible. En caso de ser tercera, el duelo sería contra un segundo, con mayor nivel competitivo.

El peor de los escenarios clasificatorios, sin embargo, sería acabar como cuarto clasificado, lo que obligaría a cruzarse contra un primero de grupo en octavos, aumentando de forma drástica la dificultad del duelo. Tras un arranque irregular, el equipo necesita dar un golpe sobre la mesa frente a Grecia, que ya tiene asegurada su presencia en octavos pero que cuenta con jugadores del calibre de Giannis Antetokounmpo, capaces de marcar diferencias en cualquier momento.

La Federación Española de Baloncesto insiste en que la clave pasa por mantener la concentración y no dejarse llevar por las cábalas. “El objetivo es simple: ganar y no depender de nadie”,repiten desde el entorno de la Selección. Ahora, la realidad es clara: la Selección aún tiene el pase en sus manos, pero las cuentas ya están sobre la mesa y el suspense está servido. En un Eurobasket que no da tregua, cada posesión puede marcar el destino de los equipos, y España deberá demostrar si está preparada para seguir en el camino hacia el título.