Más que un título en juego en el primer Clásico del año

Real Madrid y Barcelona medirán sus fuerzas en Arabia Saudí en la semifinal de la Supercopa de España

Clásico Real Madrid - Barça
Clásico Real Madrid - Barça

Por tercer año consecutivo, el inicio del año depara al panorama futbolístico la disputa de la Supercopa de España. El formato de final four inaugurado en 2020 tendrá de nuevo su sede en Arabia Saudí, al igual que en su primer año, tal y como indicaba el acuerdo entre la RFEF y los mandatarios de Arabia Saudí. Sin contar con la situación excepcional vivida la pasada campaña debido a la crisis sanitaria por la pandemia, que llevó al torneo a disputarse en Andalucía, una sede nacional.

Karim Benzema anota en el Clásico
Karim Benzema anota en el Clásico

Por primera vez desde que el torneo adaptase este formato, Barça y Real Madrid se verán las caras. Un dato curioso, ya que son los dos únicos equipos que han participado en las dos ediciones previas. En 2020, el conjunto catalán caería en las semifinales frente al Atlético de Madrid, que acabó siendo derrotado por el Madrid en la final. En 2021 era el conjunto blanco el que quedaría eliminado en semifinales frente al Athletic Club de Bilbao y el Barcelona el que llegaría a la final. Sin embargo, los culés volverían a ser derrotados, en esta ocasión en la final frente al conjunto vasco, por dos goles a tres.

Si bien los cruces han determinado que este tampoco será el año en el que disfrutaremos de la mayor rivalidad del fútbol español en la final de la competición, si han deparado un vibrante encuentro entre los dos máximos antagonistas en las semifinales.

Un Barça en horas bajas ante el clásico

También es cierto que nos encontramos en la que probablemente sea la temporada con un nivel más desigual entre ambos equipos. La marcha de Messi ha dejado evidentes secuelas económicas en el Barcelona, tanto a nivel institucional como deportivo. Secuelas que se reflejan en los resultados: el conjunto azulgrana se encuentra en sexta posición en Liga, a 17 puntos de los blancos. Mientras que en Champions League, cayeron eliminados en la fase de grupos por primera vez desde el año 2001.

Por su parte, el conjunto de Carlo Ancelotti llega en estado de gracia ante el clásico. En lo más alto de la clasificación liguera, con cinco puntos de ventaja sobre su principal perseguidor, el Sevilla, y en octavos de final de Champions. Sobre el papel, de cara el encuentro del miércoles el club merengue es el claro favorito para obtener el pase a la final.

Vinícius y Benzema, en estado de gracia

Algo que queda patente al mirar los números y el estado de forma de algunos de sus jugadores. Con jugadores como Kroos, Modric, Militao o Courtois rozando su máximo nivel. Sin embargo, todos los focos se dirigen a la dupla que está generando temor en Europa y ambición desmedida en el madridismo: Benzema y Vinícius, dos futbolistas que llegan al encuentro pletóricos. Tal es así, que un dato define perfectamente la situación en la que llegan al choque ambos equipos: Entre el brasileño y el francés han marcado 36 goles esta temporada. Uno más que los 35 que ha marcado el conjunto culé en lo que va de competición.

Y parece que cuando el viento no sopla a favor en un aspecto, no lo hace en ninguno. Mientras que Ancelotti confirmó en rueda de prensa las únicas bajas de Bale y Mariano y el regreso de Jovic y Carvajal a la convocatoria, en Can Barça tampoco acompaña el parte médico: Xavi no podrá contar con Eric García, lesionado en la última jornada de Liga, que se suma a las posibles bajas de Pedri y Ferrán, ambos positivos por COVID en la última exploración, a expensas de una última prueba negativa, y a los tocados Ansu Fati, De Jong y Araujo, que llegarían con pinzas al encuentro, con el riesgo de sufrir daños mayores en caso de forzar.

Pero si hay algo claro es que el fútbol es un deporte impredecible en el que ser favorito no implica nada. Pero sí hay una certeza respecto al partido del miércoles: será, como de costumbre, un Clásico emocionante.