Sergio Ramos se las tiene con un crack del Barça

Borncazo del de Camas a un jugador culé

Las relaciones entre los internacionales españoles del FC Barcelona y del Real Madrid corren serio peligro. Los tiempos de bonanza entre los eternos rivales llegan a su fin.

Con José Mourinho en el conjunto blanco la cosa se puso muy fea. Pocas veces miembros de ambos equipos han mostrado su animadversión por el contrario como cuando el luso ocupaba el banco madridista.

Agresiones físicas y verbales. En privado y en público. Humillaciones. Dedos en el ojo. Todo valió durante un tiempo.

No a la guerra

Iker Casillas y Xavi Hernández tomaron cartas en el asunto y frenaron la sangría. Dos clubes como el Barça y el Madrid no pueden protagonizar esos espectáculos.

La cosa se calmó y las relaciones entre los futbolistas de ambos lados han sido inmejorables durante los últimos años. Hasta Gerard Piqué y Sergio Ramos se hicieron íntimos amigos. En las redes sociales fuimos testigos de ello.

Alba rompe la tregua

Jordi alba no se cortó al finalizar la vuelta de la Copa del Rey ante la Real Sociedad. Le preguntaron en la zona mixta sobre la clasificación para las semifinales y disparó directamente al conjunto de Zinedine Zidane.

«Es un trofeo importante como los demás.  Hay veces que no se pasa la eliminatoria y se menosprecia esta competición. Es una excusa decir que esta Copa no tiene mérito«, afirmó el lateral de L’Hospitalet. El jugador estaba indignado con las declaraciones de Sergio Ramos. Edía anterior, después de la eliminación del Madrid,  el zaguero merengue había restado importancia al campeonato.

No se quedó ahí. Aprovechando su respuesta, los periodistas le cuestionaron sobre la eliminación del equipo blanco. «Como culé yo siempre quiero que pierda el Madrid, igual que les pasa a ellos con nosotros, quien diga lo contrario miente«, respondió el defensa.

Pero lo cierto es que en los últimos tiempos ningún jugador madridista ha atacado directamente al Barcelona.

Tirón de orejas

Las reacciones desde el otro bando no tardaron en llegar. El de Camas, su compañero en la zaga en la selección española, le dio el toque de atención. A él y a sus compañeros azulgrana, a los que pidió que calmaran los arrebatos del ex del Valencia.

No se puede revivir una situación como la de hace unos años. Hay que dar ejemplo. Declaraciones como esas no traen nada bueno a las relaciones actuales.

El central se lo dejó claro al futbolista y sus allegados. No se deben remover las aguas si están calmadas.