Piqué pone la cruz a un titular del Barça
El central catalán del Barça Gerard Piqué estrecha el cerco sobre uno de los intocables de Ronald Koeman
Como era de esperar, el globo del buen juego del Barça y del proyecto Ronald Koeman empieza a deshincharse. Y es que si ya con el empate ante el Sevilla antes del parón de selecciones se empezaron a disparar algunas alarmas, con la derrota en el campo del Getafe el conjunto azulgrana ha vuelto a demostrar que está muy lejos de ser un equipo competitivo y, sobre todo, sólido.
Y una de las razones por las cuales el nuevo proyecto de Koeman en el Camp Nou va a requerir de mucha paciencia por parte de los aficionados del club es por su defensa. Una defensa que, al margen de Serginho Dest, sigue siendo la misma que la de la temporada anterior.
En verano no fueron pocas las voces que, desde dentro, apuntaban que era mucho más necesaria una remodelación en la zaga que en la media o en la delantera. De hecho, Koeman estuvo apretando hasta el último momento para hacerse con un central más.
Piqué pone la cruz a Lenglet
Entre otras cosas porque, a día de hoy, el holandés tiene tan sólo tres centrales con ritmo: Piqué, Lenglet y Araujo. Samuel Umititi sigue desaparecido en combate y, teniendo en cuenta lo que apuntan desde dentro, no parece que el francés vaya a volver a formar parte de las rotaciones.
En este sentido, Diario Gol ha podido saber que Piqué, el jefe de la defensa blaugrana y el líder de la zaga, le ha puesto la cruz a un Clement Lenglet que, en partidos como ante el Getafe, se vio que no está al cien por cien.
El francés es un central con buenas dotes defensivas, pero son muchos los partidos en los que acaba siendo uno de los señalados, o bien por estar fuera de posición o bien por no ser lo contundente que debería.
Piqué sabe que el Barça necesita una buena pareja de centrales con poderío físico y buena salida de balón. Lenglet se queda a medias en los dos sentidos. El Barça, cómo no, ya trabaja para ver si, en el mercado de invierno, pueden hacerse con Eric García a la espera de que llegue el verano y tengan posibilidades de ir a por un central de primer orden mundial.
