Luis Enrique echa a Messi del Barça

El 'modus operandi' del técnico asturiano es incompatible con el crack

El FC Barcelona se desmonta. El proyecto deportivo que Johan Cruyff y Pep Guardiola elevaron a los altares de la historia del fútbol está en riesgo.

Luis Enrique Martínez aboga por un fútbol más directo, pero poco a poco está perdiendo la esencia del juego de La Masía.

Y lo peor de todo: poco a poco está echando a Leo Messi del Barça. Es evidente que el crack rosarino no se divierte. 

Es conocido que el astro argentino quiere seguir en el club azulgrana y en Barcelona, donde vive feliz. Pero sobre todo, quiere estar en un equipo donde se sienta a gusto.

Messi necesita un equipo que juegue bien al fútbol y que apueste por el toque, la posesión, las combinaciones y una buena utilización de los espacios.

Termina contrato en año y medio

Jugar al hueco es una de las claves de un Barça cada vez más vertical, que en los últimos años ha vivido de la pegada del tridente.

Pero poco a poco, está perdiendo esas señas de identidad tan importantes. Una esencia que, precisamente, es clave para retener a Messi.

Y ahora que el astro argentino podría plantear su salida del club por una cuestión, en parte comprensible, de dinero hay que tener más cuidado que nunca.

El de Rosario termina contrato el próximo 30 de junio de 2018. Queda un año y medio, pero no hay noticias sobre su renovación.

La salida de Luis Enrique

De alargarse esta situación, al crack le bastaría con aguantar una temporada más en el Barça, donde igualmente jugaría, y marchar libre en verano de 2018.

Si el club no mejora la planificación deportiva, la política de fichajes y la actitud del entrenador, podrían precipitarse los acontecimientos.

Messi pide un proyecto ganador. Y los fichajes de este año no son ganadores. Tras varios meses en el club, la sensación es que se ha fichado caro y mal.

La salida voluntaria de Luis Enrique a final de temporada podría ser un argumento favorable para la continuidad de Messi en el club. El genio decide.

La esencia de La Masía corre peligro

Nadie duda que Luis Enrique es muy del Barça y quiere lo mejor para el club. Pero él nunca fue un símbolo del juego de toque.

Su Barça está perdiendo esa esencia y ello perjudica a Messi. No hay que olvidar que, con Luis Enrique, acabó la era de Xavi. Y salió del club de aquella manera.

A Lucho siempre le han perdido las formas y ahora está atascado. Si no encuentra soluciones rápidas, puede desatarse otra crisis.

Y lo último que quiere un culé es que Messi se plantee salir del Barça. El mensaje del vestuario es: basta de experimentos. Y motivación a los jugadores.