Los pactos de la Masia: la cumbre de los directivos del Barça para evitar su dimisión

La cúpula azulgrana aplicará medidas drásticas para reconducir la economía del club

El FC Barcelona presumió de buena gestión económica entre 2010 y 2014, pero los costes se dispararon la pasada temporada y la junta directiva está obligada a enderezar las cuentas del club para evitar la celebración de nuevas elecciones dentro de dos años. Hace un año y medio, la deuda estaba cifrada en 287 millones de euros, cantidad que subió hasta los 328 millones en junio de 2015. A la espera de nuevos ingresos, la cúpula del club estudia medidas drásticas.

El Barça, deportivamente, va bien y la sensación generalizada es que el equipo sostiene a la entidad, circunstancia habitual en los últimos años. El domingo, mientras Luis Enrique y los futbolistas disfrutaban de una jornada festiva tras su contundente victoria ante la Real Sociedad, los directivos y ejecutivos del FC Barcelona se reunieron en la Masia para activar un plan estratégico hasta 2021, según informa El Confidencial.

La situación económica ocupa y preocupa mucho a Bartomeu y sus directivos, que han asumido el compromiso de contener la masa salarial destinada a los deportistas. Ésta, actualmente, representa el 73% de los ingresos del Barça, contando las secciones.

Luis Enrique insiste con Nolito

Los directivos del Barça asumieron que no pueden invertir para reforzar al equipo en el mercado de invierno, postura que choca frontalmente con el deseo de Luis Enrique. El técnico, que se siente avalado tras los buenos resultados, sigue pidiendo la contratación de Nolito, por quien el Celta pide 18 millones de euros.

El Barça, condicionado por sus problemas, intenta reactivar las negociaciones con Qatar Airways para renovar su contrato de patrocinio. El pasado junio, el ex vicepresidente económico, Javier Faus, alcanzó un acuerdo por cuatro temporadas y 240 millones de euros. Es decir, 60 millones de euros anuales hasta 2020. Posteriormente, y tras ganar el Barça la Champions, Bartomeu y el vicepresidente de media y marketing, Manel Arroyo, pidieron un aumento que rechazó tajantemente la aerolínea catarí hasta el punto de romper las negociaciones.

Los ejecutivos del club, por otra parte, buscan nuevas fórmulas para seducir a Nike con un nuevo compromiso. El Barça, que percibe unos 55 millones de euros por temporada de la multinacional estadounidense, aspira a cobrar los 94 millones que el Manchester United cobra de Adidas. Hasta ahora, sin embargo, en Nike no están por la labor de aceptar las propuestas barcelonistas y sus directivos han aparcado todos los contactos.