Los 190 millones del Real Madrid al Barça

Florentino Pérez duda. El Real Madrid lleva meses revoloteando cerca de Neymar. Los contactos del club blanco con el entorno de brasileño son ‘vox populi’ en el mundillo del fútbol. El mandatario blanco lleva peor que mal ver al que pudo ser uno de sus ‘galácticos’ estrella triunfar de azulgrana. El despertar del carioca en el presente curso ha puesto los dientes largo a Pérez que intenta pescar en un proceso de renovación complicado. Asaltar la salida de ‘Ney’ rumbo al Santiago Bernabéu se ha convertido en una opción viable que no niega ni el entorno de carioca como medida de presión para tensar la cuerda en el Barcelona.

Filtraciones desde Madrid apuntaban esta misma semana que Florentino había recibido luz verde de una reconocida entidad bancaria para hacer frente al montante de la cláusula de rescisión del jugador: 190 millones. Neymar es un valor seguro. Una apuesta ganadora que abre el grifo. Además, en el club existen estudios que proyectan un retorno de la inversión en menos de cinco años. Los números cuadran.  Y en el Madrid existe el convencimiento de que, en el mercado, no hay nada mejor. 

El frenazo llega con una reflexión mayor. Voces internas no niegan el espaldarazo deportivo del fichaje de ‘Ney’, un nuevo ‘caso Figo’, pero advierten que los 190 millones serían oxígeno para un Barcelona que podría apuntalar a Messi, reforzar el caché de Suárez y atacar un relevo de campanillas para el carioca.

Jugadores como Hazard/Lewandowski podrían brillar por igual o incluso más en un ataque demoledor. ‘Ney’, explican en la capital, sería la mejor solución al gran problema del Barça. Al fin y al cabo, y como espeta Pérez en una de sus frases de cabecera que ha hecho carera en el Real: «Si este se va, vendrá uno mejor». El Barcelona toma nota.