La guerra subterránea de Neymar con el Barça

La Copa América y los Juegos Olímpicos enfrentan al futbolista, al club y a la CBF

Guerra abierta en el Barça por Neymar. La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) quiere que el futbolista dispute, este verano, la Copa América y los Juegos Olímpicos. El reto apasiona al jugador. El club azulgrana, obviamente, se niega y solo acepta que Ney dispute los JJOO de Río. El presidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu, amenaza con «imponer» sus condiciones si no hay entente. En ese caso, el deportista disputaría la Copa América.

El caso es rocambolesco. Este verano coinciden Copa América, en Estados Unidos, y Juegos Olímpicos, en Río. Brasil quiere que Neymar dispute los dos torneos y así se lo ha comunicado la CBF al Barça, pidiendo comprensión. El futbolista, mientras, manda mensajes tranquilizadores a los suyos prometiendo su presencia en todos los campeonatos. Ney quiere ayudar a su país y, de paso, lavar algo su imagen de fiestero y mostrar el compromiso con la Seleçao.

Tensión cruzada

En el Barça están que trinan. Los dirigentes del club han mandado una carta a la CBF diciendo que Neymar necesita descanso por el bien de la entidad y de la selección. No ha habido futbolista capaz, hasta la fecha, de estar tanto tiempo sin reposo: Ney acumula dos temporadas jugando prácticamente todos los partidos del calendario con su club y, ahora, debería sacrificar las vacaciones de verano para jugar la Copa América Centenario (junio) y los JJOO (agosto). Siguen en conversaciones. «Si algún día hay que imponer las cosas, las impondremos», dice Barto.

El Barça es partidario, y así se lo ha hecho saber a los implicados, de que Neymar elija los Juegos, ya que son en su casa, Brasil, y jamás tendrá otra oportunidad igual. Es más, la siguiente Copa América, en 2019, también será en Brasil. Le piden, por lo tanto, renunciar a la Copa América de este año, que conmemora el centenario de la competición, detalle que le confiere especial sentimiento a Ney y a la CBF. Eso sí, el jugador ya sabe que si el Barça impone su voluntad, se quedará sin Juegos, ya que no es obligatoria su participación si recibe la llamada.

Bartomeu explica, no obstante, que la renovación de Neymar está encarada y que no hay que sufrir por ella. El presidente asume, sin embargo, que este rifirrafe por el tema de Brasil no beneficia en nada las negociaciones para atar el futuro.