El show de Cristiano Ronaldo en el viaje de vuelta a Madrid

El delantero portugués mostró su cara más amarga al volver de Las Palmas

Cristiano Ronaldo reaccionó con un enfado tremendo el pasado sábado en Las Palmas. Zinedine Zidane decidió sentarlo en el banquillo en el minuto 72, cuando el partido estaba empatado. «¿Por qué a mí? Hago todo para marcar y a tomar por culo…«, esputó Ronaldo en el estadio de Gran Canaria cuando dejaba el terreno de juego.

No quedó ahí la cosa. Desde el banquillo, Ronaldo siguió exteriorizando su cabreo: «¡Su puta madre!», «fodase, fodase (que se jodan)» o «¡Quedan 20 minutos, quedan 20 minutos!«, fueron algunas de las lindezas que masculló el delantero portugués.

Con cara agria en el vestuario, aislado, sin hablar con nadie. Así se comportó durante todo el viaje de regreso a Madrid. Pasó absolutamente de todo el mundo. No felicitó a sus compañeros por intentarlo hasta el final. Si él no estaba sobre el césped, nada más tenía importancia. Automarginado, Cristiano siguió dando vueltas al cambio, a la posibilidad que tenía de marcar el gol de la victoria. Al por qué el entrenador decidió privarle de esa posibilidad.

La respuesta de Zidane

Zidane le ha contestado en rueda de prensa: «El enfado de Cristiano no es sólo él. Cuando salen del campo todos están enfadados. Nosotros pensamos en el partido ante el Borussia. Es lo que hay, lo entienda o no. He tomado la decisión para el bien del jugador. No va a cambiar nada. Que se hable de todo eso más que el partido de Las Palmas o el de mañana es así y hay que convivir con eso. Estoy tranquilo. Yo no soy tonto y él es inteligente. Estamos aquí para lo mismo».