El otro triplete de un directivo del Barça: Dídac Lee

La junta directiva del FC Barcelona está plagada de empresarios de éxito. Grandes fortunas de la capital catalana que tienen en común su pasión por el Barça. El presidente Josep María Bartomeu hace caja con los fingers de puertos y aeropuertos, Carles Vilarrubí amasa dinero con la banca Rothschild y el rey de la noche barcelonesa, Javier Bordas, triunfa con sus discotecas. Jordi Mestre gobierna un importante grupo hotelero y Manel Arroyo es uno de los principales accionistas de Dorna, organizadora del Mundial de MotoGP. Otro directivo en boga es Dídac Lee.

El emprendedor de la junta directiva, vinculado a una decena de empresas, ha firmado esta temporada su triplete particular. Después de celebrar la histórica temporada del Barça de Luis Enrique, con Messi, Neymar y Luis Suárez como símbolos de un tridente de ensueño –Copa, Liga y Champions–, el directivo de origen asiático puede celebrar un exitoso cierre de 2015.

Influencers y followers

Lee acaba de ser incluido en la lista de 10 líderes económicos de España para el mañana (2016) realizada por la revista Choiseul. Un nuevo reconocimiento después de haber colaborado para que tres de los proyectos en los que está inmerso –junto a otros socios– brillen con luz propia: el auge del Barça en redes sociales, Tradeinn y Alpify.

La entidad azulgrana aglutina más seguidores que ningún otro club de fútbol en las redes sociales. Los followers del Barça sumando Facebook, Twitter e Instagram se disparan a más de 132 millones de personas. El Real Madrid es el segundo club más buscado y sigue de cerca al Barça con 129 millones de seguidores en redes. Lee fue el directivo responsable de nuevas tecnologías durante el primer mandato de Rosell y Bartomeu. 

Proyectos empresariales

En el terreno empresarial, al chino de Figueres –cómo se conoce popularmente al restaurante que montaron sus padres en la ciudad gerundense y, por analogía, al propio Dídac Lee– tampoco le va mal. No se puede decir que convierta todo lo que toca en oro, ya que arranca varias empresas al año, pero alguna de ellas crece a un ritmo de vértigo. El caso más destacado es el de Tradeinn –venta de todo tipo de material deportivo a través de Internet–, que facturó 50 millones de euros en 2015 y tiene previsión de llegar a los 80 millones en 2016.

Otro proyecto, más embrionario, que apunta alto es la aplicación Alpify. Se trata de una app pensada para alpinistas, escaladores y senderistas que puedan sufrir un accidente en ruta. En ese caso, a través de la app pueden solicitar ayuda y recibir un equipo de rescate y las instrucciones para saber como actuar. En cuatro meses han reclutado a un millón de seguidores y tiene previsión de facturar unos 300.000 euros.