El día que Florentino Pérez se desenamoró de Zinedine Zidane

El presidente puso la cruz al técnico en una jornada concreta

El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, nunca creyó en Zinedine Zidane como revulsivo. Conocía el rendimiento del Castilla en manos del técnico galo e incluso pidió su cabeza en verano por este motivo. El máximo mandatario, no obstante, entendió que su ascenso para sustituir a Rafa Benítez aportaría optimismo y positivismo en la plantilla. El efecto Zizou duró dos tardes.

Las goleadas en el Bernabéu contrastaban con los malos partidos/pinchazos del Real Madrid de Zidane lejos de casa. El equipo perdió la Liga como visitante. Y en el derbi ante el Atlético. Fue la primera derrota de la nueva etapa en el coliseo madridista (0-1); la tarde en la que Florentino se desenamoró de Zizou. El entrenador rival, Diego Simeone, barrió al madridista en la pizarra.

El Atlético del Cholo dominó en todas las parcelas, especialmente en la táctica y en los cambios. Zidane fue incapaz de reaccionar. Tampoco sus jugadores. Luego llegó la rajada de Cristiano y el primer gran giro en la relación Zizou-plantilla: los culpables son los futbolistas. Adiós piña. La única salida es ir todos a una y no es así. Desde entonces, tampoco han agradado a la presidencia algunas decisiones en unas alineaciones pensadas más por el bien del equipo que en el negocio. Ni 100 días ha durado la calma en Concha Espina.