La anécdota de Gérard Piqué sobre el fichaje que habría cambiado la historia del fútbol

El central culé ha asegurado en un directo de Twitch que Cristiano estuvo cerca de fichar por el Barça

Gerard Piqué
Gerard Piqué

Que el fútbol da muchas vueltas es un hecho. Y que las casualidades existen, y pueden dar lugar a una gran diversidad de escenarios, también. Lo que es una certeza, podía haber sido una situación totalmente distinta si se hubieran dado una serie de detalles de alguna otra manera.

Di Stéfano, el primero de una larga lista

El ejemplo perfecto de esto es la carrera de Alfredo Di Stéfano, la figura que elevó al Real Madrid a una dimensión por encima del resto de equipos, y que llegó a ganar ni más ni menos que cinco Copas de Europa con la camiseta blanca.

El que fuese uno de los dos jugadores más importantes de toda la historia del club merengue, cuando aún formaba parte del River Plate, llegó a firmar en 1953 un acuerdo con el máximo rival del conjunto blanco, el Barça.

Sin embargo, el Madrid interfirió en ese traspaso, y tras una serie de conflictos y desavenencias, el conjunto catalán optó por romper las negociaciones con el club argentino, y Di Stéfano acabó vistiendo la elástica merengue.

Alfredo Di Stéfano.

Una operación que se terminó concretando por cuestión de detalles, pero que a la larga tendría un efecto demoledor en el panorama futbolístico europeo, ya que la figura del argentino terminó por convertir al Real Madrid en el mejor club del siglo XX, en un efecto mariposa que nadie podría haber previsto.

Al igual que ocurrió en esta situación, a lo largo y ancho del mercado de fichajes se han dado cientos de miles de situaciones similares, con futbolistas que estuvieron a escasos flecos de firmar por un conjunto, para tiempo después acabar triunfando con la camiseta del máximo rival.

Cristiano Ronaldo y el Barça, una opción que estuvo sobre la mesa

De uno de estos casos habló en la jornada de ayer Gerard Piqué durante un directo emitido en Twitch junto al streamer de moda, Ibai Llanos. Entre una gran diversidad de temas deportivos, referidos en parte a la actualidad del conjunto culé, el central catalán habló de algo que sorprendió en gran medida a propios y extraños.

En la charla, Piqué afirmó de forma contundente que Cristiano Ronaldo estuvo muy cerca de fichar por el Barça, algún tiempo antes de que su llegada al Real Madrid tuviese lugar.

Cristiano Ronaldo y Gérard Piqué.

Una situación que se remonta ni más ni menos que a 2003, cuando el central catalán formaba parte de las filas del Barça B y el delantero portugués aún jugaba para el Sporting de Lisboa. Desde su debut en el conjunto lisboeta, Cristiano brilló y llamó la atención de casi todos los clubes de Europa, incluyendo el conjunto culé.

Hubo acercamientos entre ambas partes, pero la directiva del club catalán finalmente se decantó por su compatriota, Ricardo Quaresma, y Cristiano puso rumbo a Old Trafford para vestir los colores del Manchester United, donde terminaría coincidiendo con Gérard Piqué. Una decisión que el conjunto culé terminaría lamentando.

Un desenlace que podría haber sido muy distinto

Sobre todo, teniendo en cuenta que tan solo un año después de este frustrado traspaso, debutó con el Barça Leo Messi, el que ha sido junto al luso el mejor jugador de los últimos cincuenta años de forma indiscutible.

Más aún si echamos la vista adelante, y es que, en 2009, el portugués terminaría fichando por el Real Madrid en un traspaso récord. Un club en el que hizo historia, ganó cinco Champions League, cuatro Balones de Oro y se ha convertido en el máximo goleador histórico de todas las competiciones.

Algo que ha tenido lugar simplemente porque en 2003 la directiva del conjunto catalán decidió apostar por Quaresma en lugar de por Cristiano. Una decisión que, de haber sido diferente, habría evitado que el portugués se convirtiese en la bestia negra del Barça vistiendo la camiseta del máximo rival, y que podría haber brindado al mundo del fútbol la posibilidad de que las carreras de Messi y Cristiano se hubieran desarrollado como compañeros, y no como antagonistas.