Top secret: El crack que no lleva nada bien su nuevo rol en el Barça

El Barça arrancó la nueva temporada como la acabó: a lo grande. Un recital de goles sirvió al cuadro azulgrana para aplastar al Betis y contentar a la afición, preocupada por las incertidumbres económicas del club y por la llegada de unos fichajes que no terminan de convencer. El mensaje que mandaron Messi y Luis Suárez fue claro. Seguirán mandando los de siempre, que nadie se preocupe, pero ahora habrá más fondo de armario para casos de urgencia.

Evidentemente, Messi y Suárez no tienen de qué preocuparse. Pero no piensan lo mismo otros jugadores de la plantilla, titulares habituales en los últimos tiempos, que podrían tener una competencia más incómoda de lo que esperaban. Es el caso de Jordi Alba.

Para el de L’Hospitalet fue muy cómodo compartir el vestuario con Adriano Correia, un jugador con talento pero mermado físicamente que nunca supuso competencia para él. La llegada del francés Lucas Digne, en cambio, ha encendido las alarmas de Alba, que en la última temporada venía experimentando un ligero bajón de juego. Sobre todo, en la faceta ofensiva.

Aviso

Alba no hizo la pretemporada como el resto de la plantilla y llega tarde al estreno liguero. Pero aún así, la cara que puso cuando vio que Luis Enrique le pedía el cambio en la segunda mitad contra el Betis fue de pocos amigos. Parece que Lucho quiere que Digne tenga minutos y genere una competencia sana pero real por el puesto de lateral izquierdo. Alba tendrá que ponerse las pilas.