Sergio Ramos esperó a Gerard Piqué en el túnel al final del Clásico (¡Y se lía la de Dios!)

El capitán del Real Madrid fue expulsado en el minuto 77

No se muerde la lengua. El duelo entre el Real Madrid y el FC Barcelona ha vuelto a alcanzar límites insospechados de rivalidad. Ambos equipos se jugaban mucho, por lo que tanto los merengues como los culés han puesto toda la carne en el asador.

Los jugadores han vivido el Clásico como el encuentro clave que es, aunque esta tensión ha sido más palpable en los futbolistas más veteranos.

Tanto es así que el punto álgido ha llegado con la expulsión de Sergio Ramos. En el minuto 77, el capitán blanco ha visto roja directa por una entrada a Leo Messi. El colegiado ha considerado que debía ver la pena máxima, por lo que no ha dudado.

Toma la palabra

Como era de esperar, esta decisión ha encendido la llama entre el equipo merengue. La reacción del central de Camas ha sido total. Sin pelos en la lengua, antes de retirarse del terreno de juego, el andaluz se ha dirigido a Gerard Piqué para recriminarle el robo arbitral que suponía dejar al Madrid con un hombre menos sobre el verde.

Ramos ha copiado la técnica empleada por el barcelonista en el duelo ante el Villarreal. Tras decirle a Gerard «ahora habla», ha levantado la cabeza para mostrar su malestar a los responsables del palco. Calcada a la reacción de Piqué.

Ahora bien, a diferencia del líder el Barça, Sergio no se ha quedado sobre el césped para calentar públicamente el ambiente. Por su parte, el sevillano se ha retirado y ha esperado a su compañero de selección en los túneles. Entre bambalinas.

El defensa le ha achacado al culé que esta vez se han visto beneficiados por las decisiones del árbitro, por lo que le ha aconsejado que no hable tan fácilmente. «Ahora ves a quejarte«.

Según apuntan voces presentes en la situación, Piqué ha preferido dejar enfriar la tensión y no ha contestado. Gerard sabe lo que es estar en caliente, por lo que ha bajado la cabeza y ha apaciguado los ánimos.