El Real Madrid mantiene una vía abierta a espaldas de Zidane

Zinedine Zidane consume su crédito en el banquillo. El Real Madrid de Zizou presenta las mismas lagunas que el del despedido Rafa Benítez, con el agravante de que el técnico francés trata a los jugadores como amigos, con privilegios impropios de la entidad. Los dirigentes del club, especialmente, Florentino, mantienen una vía abierta a espaldas del entrenador galo para anticiparse al difícilmente evitable año en blanco.

El Real Madrid explora otros caminos para el banquillo. Zidane lo sospecha desde el minuto uno, aunque no tiene la certeza de ello. Sobre la mesa del despacho de Valdebebas tiene, no obstante, una promesa de renovación si logra un título (como ocurrió con la décima y Ancelotti). Solo le queda la Champions. En caso contrario, Florentino insistirá en el seleccionador de Alemania, Joachim Löw. Fuentes próximas a presidencia sugieren que es su técnico favorito. Intentó su fichaje hace un año, pero la respuesta fue negativa.

Florentino siempre tuvo dudas respecto a Zidane. El presidente, de hecho, pidió su cabeza en verano, cuando dirigía al Castilla. Pérez no comparte el amiguismo implantado por Zidane en el vestuario (el mismo que le costó el puesto a Ancelotti). El problema para el dirigente es que Zizou es hombre de club, un mito en la historia de la entidad, y no puede permitirse su salida por la puerta de atrás, como ocurrió con otras estrellas.

Löw, por su parte, ha pedido tiempo para tomar una decisión. Su prioridad es la Eurocopa con Alemania. Su futuro depende también del devenir del Madrid en la Champions. No habrá resolución antes del verano.