La cláusula de la discordia que desata un conflicto entre el Barça y el Atleti
Los colchoneros aprovechan una cláusula del contrato para no ejercer la opción de compra sobre Griezmann
El pasado verano fue uno de los más movidos que se recuerdan en Can Barça. La elección de Joan Laporta como nuevo presidente de la entidad culé parecía indicar un inequívoco cambio de signo en lo referente a la dirección del club, tras la convulsa etapa en la que Josep María Bartomeu fue el máximo mandatario del conjunto catalán.
Sin embargo, muy pocos se esperaban que los efectos de la llegada de Laporta fuesen tan devastadores. Debido a la ineficaz gestión salarial de su predecesor, y sumado a la crisis económica derivada de la pandemia, el actual presidente del club azulgrana se encontró con una situación financiera cuanto menos complicada, ante la cual se tuvieron que tomar decisiones complicadas.
Unas decisiones que, en muchos casos, se manifestaron en forma de salidas del club, algunas más dolorosas, y otras menos. La más sonada, sin ningún tipo de duda, fue la de Leo Messi. No obstante, otros pesos pesados del conjunto azulgrana también salieron, como es el caso de Antoine Griezmann. No obstante, en el caso del francés, lo hizo sobre la bocina del cierre del mercado y prácticamente por la puerta de atrás.
Griezmann ponía fin a una etapa con más pena que gloria
Y es que la etapa de Griezmann en el Barcelona, si bien no se puede tildar de rotundo fracaso, lo cierto es que en absoluto fue lo que los aficionados y el conjunto culé esperaban. Llegó con un desembolso de 120 millones de euros de por medio, con el cartel de estrella del fútbol mundial. Sin embargo, en el Camp Nou, no apareció ni rastro de aquel futbolista que deslumbró al mundo en el Atleti.
Por ello, todos los planes del ariete galo pasaban por regresar al Wanda Metropolitano, donde ofreció su mejor nivel, por medio de una compleja cesión que incluía unas cláusulas de opción de compra si se cumplían unas determinadas condiciones.
No obstante, en su primera temporada en su regreso al conjunto rojiblanco, su rendimiento tampoco se acercó lo más mínimo a lo mostrado en su primera etapa en el Atleti. Tal es así, que ni siquiera logró colgarse el cartel de titular indiscutible con el Cholo, quien había sido el principal valedor de su regreso a la entidad colchonera. Por ello, ha surgido un problema entre Barça y Atleti con el delantero galo como principal punto a tratar.
Las condiciones que han desatado una guerra entre Barça y Atleti
La realidad más cercana es que el francés quiere continuar como jugador del Atleti, y, por otro lado, Simeone cuenta con él. No obstante, la directiva colchonera no tiene claro si es conveniente hacer un esfuerzo económico por un futbolista que no ha vuelto a mostrar el nivel que llevó al conjunto catalán a pagar una millonada por él.
Por este motivo, a poco más de una semana para que cierre el mercado, el futuro del francés sigue siendo una incógnita. Y es que las cláusulas de su contrato han sido utilizadas en favor de unos y otros en su propio beneficio. Y de todas ellas, ha habido una cláusula de la discordia que ha generado un conflicto institucional entre ambos clubes.
Una cláusula que indica que el Atleti tendría que ejercer una opción de compra obligatoria por valor de 40 millones de euros si Griezmann juega más del 50% del tiempo que esté disponible en la plantilla del Cholo. Por este motivo, en los dos partidos que llevamos de temporada, el francés ha jugado exactamente 29 minutos, la cantidad justa para que el conjunto colchonero no tuviera que ejercer la opción de compra.
De continuar así, el Atleti no se vería obligado a ejercer la opción de compra, por lo que Griezmann regresaría al Barça. Una opción que Joan Laporta quiere evitar a toda costa, pues el francés, aún con un año de contrato restante, y con un salario por encima de los 20 millones de euros, sería todo un problema en el ámbito financiero para el Barça. Algo que se sumaría a los problemas que ya tiene el Barça para inscribir jugadores.
Una situación con soluciones complejas
Griezmann, por su parte, ve como su suturo continúa sin aclararse a apenas tres meses de que arranque el Mundial de Qatar, por lo que es otro de los afectados por esta situación. Por ello, parece inevitable pensar que los clubes acabarán alcanzando un acuerdo económico para que haya los mínimos perjuicios posibles tanto para los clubes como para el jugador.
La opción que parece más viable es una renegociación de los términos de su cláusula. El Atleti no está dispuesto a pagar esos 40 millones de euros, y el Barça no se puede permitir el regreso de un futbolista con su salario a escasos días del cierre del mercado. Por este motivo, lo más lógico parece ser un acuerdo para rebajar el precio que tendría que pagar el Atleti para quedarse con la totalidad de sus derechos, algo que ya ocurrió con Coutinho.
Una situación que, no obstante, ha generado una creciente tensión entre ambos clubes, puesto que desde la Ciudad Condal consideran que la triquiñuela del conjunto rojiblanco para forzar la situación ha sido desleal. Sea como sea, queda poco más de una semana para conocer el final de este culebrón.
