Así ha traicionado Griezmann a Messi: trapos sucios del vestuario del Barça contados a Koeman

Por si en el Camp Nou no tenían suficientes líos ya con la más que probable salida de Leo Messi, ahora unas palabras del ex agente de Antoine Griezmann han encendido aún más la mecha.

Y es que, según Eric Olhats, el delantero francés tenia decidido abandonar el Barça hasta que una conversación con Ronald Koeman le ha hecho cambiar de opinión. “Antes del cataclismo contra el Bayern, Antoine solo tenía un deseo: marcharse”, apunta el ex agente. Y va más allá: “Antoine sentía que él no era parte de los planes del club, que no podía continuar así. Estaba estudiando seriamente salir. Luego pasó lo que sabemos y una conversación con Koeman le tranquilizó. Le expresó sus planes, porque lo considera un jugador importante para el futuro”.

El mismo Eric es el que, de manera indirecta, dio las claves del desengaño de Griezmann con el club antes de hablar con Koeman: “Los balones nunca le llegaban y el comportamiento del entrenador con él fue por lo menos cuestionable. Es un chico que ha mantenido mucha ilusión y trabajó con ganas. Era imposible pasar otro año así”.

Un dardo más que claro a Leo Messi. Y es que, como bien saben los aficionados del Barça, el delantero argentino nunca ha tenido precisamente a Antoine entre sus favoritos. Ni dentro ni fuera del campo. Ahora es el galo el que se ha vengado con una traición.

La traición de Griezmann a Messi

Cuentan desde dentro que Koeman ya le hizo saber, sobre todo tras hablar con Messi y ver que el argentino no estaba precisamente muy por la labor de encabezar su nuevo proyecto, que el francés iba a ser un jugador importante.

Griezmann no deja de ser uno de los mejores delanteros del mundo y un jugador muy contrastado. El problema, cuentan desde su entorno y así se lo ha hecho saber él a Ronald, es que la dupla Messi-Suárez no es que le ayudara mucho a su adaptación.

Si bien es cierto que en el seno del vestuario no sentó nada bien todo el lío con ‘la decisión’ de Griezmann hace dos veranos, nombres como los de Piqué, Busquets o Alba ya perdonaron al galo en este sentido viendo, entre otras cosas, que había llegado al Barça con la intención de sumar.

Pero Messi y Suárez tomaron mucha distancia con él e incluso no movieron ni un dedo cuando vieron que los minutos de Antoine empezaban a caer en picado. Ahora que Griezmann ya sabe que la intención de Leo es la de irse y que Suárez no volverá a vestir de azulgrana, ha querido ganarse la confianza de Koeman contándole los trapos sucios del vestuario culé.

Sobre todo los relaciones con el capitán y su amigo Suárez. Entre otras cosas, cómo ellos dos fueron dos de los que mas presionaron para que la figura de Quique Setién tuviera cada vez menos peso, cómo han ido poco a poco arrinconando a jugadores como Dembélé o Rakitic, como poteciaro internamente a Ansu Fati para así desplazarlo a un segundo planto y cómo, al final, buena parte de las decisiones pasaban por sus manos. Algo que, desde luego, o al menos esa es su intención, con Koeman no pasará.

Griezmann se siente ahora fuerte porque ve que, con el charrúa fuera y con Messi con pie y medio también fuera, puede ser él el líder de un ataque en el que, por primera vez, juegue en su posición. Algo que, por ejemplo, nunca hizo cuando Suárez y Messi estaban en el campo.

Veremos, eso sí, que fichajes tiene en mente el club para acompañar a una delantera en la que, de la mano de Koeman, Antoine tendrá un rol mucho más importante.