Las cloacas del Real Madrid: el lado más oscuro de Florentino Pérez

El presidente blanco mueve los hilos del deporte desde su butaca negra

Florentino Pérez vive en una enorme casa valorada en 30 millones de euros. Consta de tres plantas y ático, pero está dividida en siete pisos. En uno de ellos tiene un despacho privado con una enorme butaca negra. El sillón negro del presidente blanco.

Desde allí, Florentino mueve sus hilos. También desde el despacho que tiene en el Santiago Bernabéu o en las oficinas de ACS. Pero su casa, blindada, es su principal guarida.

Florentino está enganchado a la comunicación. Sabe que es un poder imprescindible para controlar los otros poderes: la influencia y el dinero.

La relación del presidente del Real Madrid con la prensa es apasionante. Cualquiera diría que en su día soñó con ser periodista. Lo cierto es que prefirió un oficio que le diese más dinero.

Los «soldados rasos» de Florentino

Sin embargo, al todopoderoso Florentino no le importa bajar de vez en cuando a las cloacas. Es más, le gusta.

El presidente del Madrid se codea con los «soldados rasos» de la prensa, como los describe Fermín de la Calle en un crítico artículo de Vóz Pópuli.

Habla con los periodistas que «peinan las salas de prensa y las zonas mixtas». Los mima. Les da informaciones privilegiadas a través de Whatsapp. Se lo pasa teta.

A cambio, busca conseguir un trato de favor para el Madrid. O no. En ocasiones no tiene problemas en difundir informaciones que perjudican a sus futbolistas.

Caña a los futbolistas caprichosos

Esos «multimillonarios caprichosos» que a veces se pasan de la raya pidiendo. Como fue el caso de Sergio Ramos, artífice de la Décima y la Undécima con sus goles. Como en el último clásico.

Florentino no tuvo problemas en desprestigiar al de Camas, al que supuestamente adora, cuando su hermano René se puso farruco para conseguir la renovación dorada del capitán blanco.

Tampoco tuvo reparos a la hora de descuartizar al antiguo capitán, Iker Casillas, o a los anteriores entrenadores blancos: Rafa Benítez, Carlo Ancelotti y José Mourinho.

Amigos, enemigos y regalos

Se comenta que Florentino tiene comprada a buena parte de la prensa. Desde El PaísAntonio Caño– a La Sexta, donde mantiene una especial relación con Antonio García Ferreras y Josep Pedrerol.

Florentino conoce la información antes de que se publique. Muchas veces da el visto bueno. Y compensa a los más fieles de la corte.

¿Cómo? Con exclusivas, espacios en tertulias de radio o televisión, trabajos para Real Madrid TV o el departamento de comunicación blanco y, se rumorea, que hasta con descuentos para la adquisición de pisos construidos por ACS o alguna de sus filiales.

En cambio, tiene una amplia nómina de enemigos a los que, poco a poco, ha logrado quitar de en medio: Manolo Lama, Diego Torres, José Manuel Abellán o el Butanito José María García