El delfín de Florentino Pérez en el Real Madrid

El presidente medita dejar la presidencia en manos de su vicepresidente segundo

Florentino Pérez está tocado. El caprichoso destino ha querido que el Atlético le recuerde la situación que le llevó a la dimisión justo hace una década. El equipo está a 12 puntos del Barça (eran 10 puntos en 2006); huele a segundo año en blanco, a la sombra del eterno rival; ha fracasado en el banquillo, con tres técnicos en nueve meses y con nuevas dudas, y ni siquiera completará su gran apuesta: la remodelación del Bernabéu, paralizada por orden judicial. Muchas cosas han pasado por la cabeza del presidente en los últimos días. Entre ellas, su sucesión en la poltrona.

El delfín de Florentino Pérez es el actual vicepresidente segundo del Real Madrid, Eduardo Fernández de Blas. Se conocen desde la infancia y es íntimo de Enrique Pérez, el hermano del presidente. Los tres forman parte de la junta directiva. Fernández de Blas saltó a la palestra por formar parte de la peña Al Ataque, una de las más duras con el ex presidente Ramón Calderón. Las malas lenguas insinúan que fue el arma oculta de Florentino para derrocar a su predecesor. Otro dato delicado es la buena relación de Fernández de Blas con algunos de los socios más violentos, como José Luis Ochaíta (otrora líder de Ultras Sur) y Carlos Clara (peña La Clásica), que tiene prohibido el acceso al estadio por intentar entrar en él con una navaja.

Fernández de Blas es el socio 6.275 del Real Madrid. Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, es socio fundador del despacho que lleva su nombre, a través del que ha desarrollado trabajos para las empresas del grupo Dragados, perteneciente a ACS, presidida por Florentino Pérez. En el Real, destaca por su papel de patrono de la Fundación (2000-2006 y 2009-actualidad), los servicios prestados como Socio Representante, y la vicepresidencia. Su mayor problema para ser candidato es el aval, aunque podría correr a cargo de Florentino y mantener a Enrique en la junta directiva. La opción De Blas lleva años en la cabeza de Pérez. Puede ser ahora.