Zidane ya no es tan amigo de Cristiano Ronaldo: lo que pasó el lunes en el Real Madrid

El portugués desoye a su entrenador

Cristiano Ronaldo no está cómodo en la Liga. Los goles que le impulsan en la Champions League no terminan de llegar en la competición doméstica, y el portugués no consigue deshacer la nube negra que crispa su humor durante los 90 minutos.

El siete madridista está realmente indignado con la sanción que se le impuso por el empujón a De Burgos Bengoetxea y quería mandar un mensaje a los responsables de la liga española, pero su obsesión se ha topado con la mala fortuna y el luso se ha plantado en la sexta jornada sin estrenar su casillero.

Zidane quiso reconducir la frustración de su estrella con una charla antes de que el jugador se marchara a la concentración con su selección, pero se topó con un Ronaldo poco dispuesto a escuchar los consejos paternales de su técnico.

Una posición que le perjudica

El enfado del de Madeira sólo se resolverá con goles, y para encontrarlos Cristiano cree que es mejor que juegue acompañado de otro ariete. Ante el Espanyol, formó primero junto a Asensio en una suerte de doble falso 9, y después compareció como único delantero con la entrada de Lucas Vázquez y la caída de Asensio a la banda.

Por ese motivo, señala también a su entrenador en su mal momento. Considera que no está sacando todo el partido posible de su futbol y prefiere que se centre en adaptar su sistema y no en hacer terapia.

El poco interés de Ronaldo en sus consejos ha provocado el enfado de Zidane. Desde que aterrizó en el Bernabéu el marsellés ha demostrado ser un excelente gestor de egos, pero también tiene un carácter fuerte que saca a relucir cuando la ocasión lo merece.

El mal momento de Ronaldo afecta al futbolista pero también al resto del equipo. Por esa razón, Zizou considera que es su deber colaborar para solventarlo cuanto antes. Si Ronaldo prefiere ignorar