Se acabó. El culebrón de Álvaro Morata llegó a su fin. El jugador no quería seguir siendo suplente en el Real Madrid y finalmente logró encontrar la salida que buscaba, y que dejaba contentas a todas las partes, Florentino Pérez incluido.
El paso a seguir ahora sería cubrir la salida del canterano con otro delantero centro, pero en el Real no tienen estas intenciones. Sobre todo Zinedine Zidane, que no quiere a ningún otro delantero que pueda causar conflicto con Karim Benzema.
Privilegiado
El técnico galo quiere que su compatriota siga siendo el titular en el centro del ataque y no quiere ningún a ningún futbolista que le pueda competir el puesto. En gran parte porque o quiere tener a otro jugador en el banquillo con malas caras como le ocurrió a Morata.
En este sentido, el míster le ha pedido a Florentino que se olvide del fichaje de Kylian Mbappé y que refuerce otras posiciones que requieren más urgencia.
Las indicaciones de Zidane
Una de ellas es la de defensa central. Zidane no termina de confiar en que Nacho tenga el nivel suficiente para cubrir las posibles bajas de Raphaël Varanne y de Sergio Ramos -este último sabe que tendrá que dosificarlo- y no cree que Jesús Vallejo esté preparado para adquirir tantos galones.
El otro escogido por Zidane es Eden Hazard. El belga es una de las debilidades del entrenador. La polivalencia del jugador del Chelsea le permitiría cubrir la posición de extremo, de interior y de delantero centro, con lo que el Real podría ahorrarse algunas de las incorporaciones que pretende para estas posiciones.
No obstante, en la T4 del Santiago Bernabéu no decidirán el próximo objetivo hasta que no se confirme la salida de Danilo. En las últimas horas el Manchester City ha ganado enteros para hacerse con los servicios del brasileño, por el que el Madrid espera sacar entre 30 y 35 millones de euros. Con 110 millones en el bolsillo para fichajes, será el momento de mover ficha para el Real.
