Sergio Ramos o “Y ahora vete de copas”. Y no es Benzema, ni Isco, ni Marco Asensio: ojo a lo que tapan en el Real Madrid

El último tropiezo del Real Madrid ante el Villarreal ha vuelto a levantar las tensiones en el entorno del equipo merengue. Si todo parecía de color de rosa tras la consecución del Mundial de Clubes, no fue más que un espejismo debido, posiblemente, a la poca entidad de los rivales.

El tropiezo del Madrid le devuelve a la realidad

Con el retorno a España y a la Liga se han vuelto a ver las carencias de una plantilla que no está cumpliendo con las expectativas esperadas y que está caduca y con mucha falta de ambición y ganas.

Muchos han quedado señalados tras una segunda parte en el Estadio de La Cerámica que dio vergüenza ajena presenciar -y lo peor es que no es la primera vez que ocurre, pero los resultados han ocultado la desgana de algunos-.

El señalado del empate del jueves

Tras el partido del jueves, uno de los que más críticas han concentrado es Marcelo. El brasileño lleva una campaña pésima. Nunca ha sido un buen defensor, pero lo contrarrestaba con su gran labor en ataque.

Sin embargo, ahora ni una cosa ni la otra. Ante el ‘submarino amarillo’, los dos goles llegaron por su lado y el segundo fue una clara muestra de que no está rindiendo como se espera de uno de los ‘pesos pesados’ de la plantilla.

Además, en labores ofensivas ya no es tan desequilibrante como antes y en el vestuario ya empiezan a dudar del rendimiento y la actitud del futbolista carioca: “Y ahora vete de copas”, es alguno de los comentarios que se han dicho de puertas para dentro, aunque intenten ocultar el ‘mal rollo’ existente.

Cristiano le quiere a su lado

El jugador ha alcanzado ya la treintena y sabe que su carrera en el Real Madrid tocó techo estos años pasados. Por lo que, estaría incluso pensando cambiar de aires más pronto que tarde, y Cristiano, que tenía al brasileño como uno de sus únicos grandes amigos en el vestuario blanco, ya está convenciéndole para que ponga rumbo a Turín.

Florentino Pérez no vería con malos ojos su salida y está en su agenda desprenderse de algunos ‘pesos pesados’ de la plantilla, entre ellos el lateral izquierdo blanco.